Día de Muertos

Día de Muertos: ¿Cuántos pisos debe tener una ofrenda o altar según la tradición?

Descubre cuántos pisos debe tener una ofrenda de Día de Muertos y qué representa cada nivel, desde las creencias católicas hasta las tradiciones prehispánicas del viaje al Mictlán

Día de Muertos: ¿Cuántos pisos debe tener una ofrenda o altar según la tradición?
Conoce cuántos pisos deber tu altar de Día de Muertos Foto: Imagen Generada por IA de Google Gemini / Freepik / Imagen Generada por IA de Freepik / Especial / Imagen Ilustrativa

El Día de Muertos está mucho más cerca de lo que imaginamos, y con su llegada comienzan los preparativos para una de las celebraciones más emblemáticas de México. Las calles se llenan de color, las flores de cempasúchil adornan los altares y las familias se preparan para honrar la memoria de sus seres queridos.

Es el momento perfecto para empezar a planear cómo decorar el altar, qué platillos tradicionales preparar y, por supuesto, disfrutar de los sabores típicos de la temporada, como el pan de muerto o el chocolate caliente. Cada detalle cuenta para mantener viva esta hermosa tradición que combina el respeto, la alegría y el amor por quienes ya partieron.

Aunque todavía faltan algunos días, el ambiente del Día de Muertos ya se siente en el aire. Las calles comienzan a llenarse de cempasúchil, el pan de muerto aparece en cada panadería y las familias preparan los altares para recibir a sus seres queridos. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cuántos pisos debe tener una ofrenda según la tradición y qué representa cada uno? En GastroLab te contamos qué significan los niveles del altar y cómo cada uno refleja la conexión entre la vida y la muerte.

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¿Qué significa un altar de 3 niveles?

Si bien en muchos hogares se acostumbra colocar una ofrenda sencilla de un solo nivel, existen distintas formas y significados según la región o las creencias familiares. En varias partes del país, los altares se construyen con varios pisos, y cada uno simboliza una etapa espiritual o un concepto dentro de la vasta cultura mexicana. A continuación, te explicamos qué representa cada piso en un altar de la ofrenda.

El altar de 3 pisos es una de las formas más tradicionales y representa el cielo, la tierra y el purgatorio, de acuerdo con la interpretación católica. Estos 3 espacios simbolizan el recorrido del alma humana: primero en la tierra, después en el purgatorio y, finalmente, en el cielo. 

¿Qué significa un altar de 7 niveles?

Cuando una ofrenda se construye con 7 pisos, su origen se vincula con nuestra herencia prehispánica. En esta tradición, cada escalón representa una de las 7 etapas —de las 9 que existen— que el alma de las personas que fallecieron debe recorrer para llegar al Mictlán, el inframundo mexica y el lugar a donde iban las almas de los muertos. Aunque, para otras comunidades los 7 niveles representan los 7 pecados capitales,

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¿Qué significa un altar de 9 niveles?

Algunas comunidades elaboran ofrendas de 9 pisos, que representan las 9 pruebas que el espíritu debe superar para llegar al descanso final, según las antiguas creencias. Este tipo de altar es una evocación completa del viaje del alma desde el Mictlán hasta llegar a su antiguo hogar. 

¿Qué llevan las ofrendas?

En todos los casos, los altares incluyen elementos esenciales: veladoras para guiar el camino de las almas, agua y sal para purificar, comida y pan de muerto como ofrenda, flores de cempasúchil que marcan la ruta del regreso, y copal o incienso para limpiar el ambiente, además de las fotografías de los familiares que se quieren recordar. Cada familia adapta su altar según sus costumbres, algunas personas llegan a colocar platillos enteros, bebidas y dulces que solían ser los favoritos de sus familiares, pero el propósito sigue siendo el mismo: rendir homenaje, recordar con amor y mantener viva la conexión entre los vivos y los que ya partieron.

¿Cuándo se pone el altar de muerto?

Las fechas para poner la ofrenda del Día de Muertos varían según la tradición y las familias, pero generalmente el altar comienza a colocarse desde el 27 de octubre, cuando se reciben las almas de las mascotas, seguido del 28 para quienes murieron trágicamente. El 30 y 31 de octubre se dedican a los niños no bautizados, mientras que el 1 y 2 de noviembre se honran a los santos y fieles difuntos. Aunque cada familia tiene sus propias costumbres, el objetivo es el mismo: rendir homenaje a quienes ya partieron y mantener viva su memoria.

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