Revendedora de Costco compra 300 Roscas de Reyes y no se le venden; pide ayuda en redes

No cabe duda de que los revendedores seguirán siendo tendencia después del Día de Reyes. Esta vez, otra persona se ha vuelto viral tras pedir en redes sociales que compren roscas de Reyes de una popular tienda de mayoreo con un evidente sobreprecio. Esto ocurrió después de adquirir varias piezas y no poder venderlas antes del 6 de enero, una situación que ha generado indignación y burlas.

Esta historia no es nueva. En años anteriores, hemos visto casos similares donde personas compran grandes cantidades de roscas de Reyes para revender durante estas fechas. Sin embargo, al ofrecerlas a un precio demasiado alto para intentar sacar el máximo provecho, terminan con productos sin vender y con pérdidas económicas significativas, por lo que deben acudir a redes sociales para pedir ayuda.

Tan solo el año pasado, se hizo viral la historia de un hombre que recurrió a las redes sociales para pedir que compraran las roscas sobrantes varios días después del Día de Reyes. Esto desató críticas y burlas en sus cuentas, incluso en publicaciones posteriores donde intentaba emprender otros negocios, pues los internautas se dedicaron a seguir la vida en línea del revendedor por varios días.

Una nueva revendedora se vuelve viral

Este año, una historia similar ha causado aún más indignación. En una publicación anónima en un grupo de compra y venta en Facebook, una mujer llamada Xasely declaró haber gastado todo su aguinaldo en la compra de 300 roscas de Costco, con la intención de revenderlas. Sin embargo, solo logró vender 35, lo que causo varios comentarios a modo de burla en su publicación

En el mismo post, Xasely explicó que cada rosca de Reyes se vendía a un precio de $1,200 pesos. Para justificar el elevado costo, mencionó que el esfuerzo de hacer filas, comprarlas, guardarlas y mantener la membresía de la tienda justificaba ese precio. También añadió que el objetivo de venderlas era financiar sus vacaciones familiares a Tulum, por lo que pedía ayuda para deshacerse del resto de las roscas.

Por supuesto, la situación desató un alboroto en redes sociales. Muchas personas se indignaron por el precio y por la manera en que la mujer solicitaba ayuda, pues consideraban que sus palabras eran "groseras". No obstante, las risas no faltaron, y los internautas aprovecharon la ocasión para burlarse de la situación con memes y comentarios jocosos.

Algunos usuarios señalaron que, debido al tono de la publicación, era probable que se tratara de una historia falsa. Sin embargo, en el post se incluían fotos de las supuestas roscas y del lugar donde se estarían vendiendo. Esta historia es un claro ejemplo de por qué revender productos con sobreprecio puede ser una mala idea, especialmente cuando hay otras personas ofreciendo el mismo artículo a precios mucho más bajos