Día de Muertos
Origen y significado del agua y la sal en tu ofrenda de Día de Muertos
En este Especial de Día de Muertos. te diremos cómo y por qué se pone la sal en tus ofrendas del Día de MuertosCon este ambiente previo al Día de Muertos y de las fiestas de disfraces, lo lógico es que empecemos a pensar en las ofrendas, que son la insignia del mes de noviembre, pero se empiezan a preparar desde octubre. Por esa razón es que debemos de juntar los elementos básicos de un altar de muertos, que tampoco son tantos.
2 de los elementos indispensables en toda ofrenda del Día de Muertos son: El agua y la sal. Y es que estos elementos tienen un significado profundo y grande, que no pueden faltar en la ofrenda, por lo que desde hace siglos se tienen en cuenta y se colocaban desde tiempos prehispánicos.
De acuerdo con información del Gobierno de México, la sal es un elemento de purificación, que sirve para evitar que el cuerpo de los difuntos se corrompa en su viaje de ida y vuelta para el siguiente año. Por eso es muy importante poner un poco de sal por persona recordada en cada ofrenda del Día de Muertos.
Significado de la sal en la ofrenda
La sal se coloca en la parte superior del altar, junto con la imagen del difunto en forma de pequeña cruz. Hay quienes también la colocan en recipientes de cristal o barro. Es un elemento que no ha faltado en las ofrendas desde tiempos prehispánicos y desde hace siglos han tenido su lugar en cada altar.
¿Qué significa el agua en la ofrenda?
En el caso del agua, también tiene un especial significado en la ofrenda. Significa la fuente de la vida. Se ofrece a las ánimas para que mitiguen su sed, después de su largo recorrido y fortalezcan su regreso. En diversas culturas simboliza la pureza del alma. Los mayas tenían la creencia de que los cenotes, que ellos consideraban sagrados, eran la puerta al inframundo.
En muchas representaciones de altares suele colocarse una vasija con agua, simbolizando un cenote y la entrada al inframundo. Según Google Arts & Culture, el agua se coloca en la ofrenda para saciar la sed de los espíritus y también simboliza la vida. Por ello al levantar nuestra ofrenda, siempre debe de existir un vaso de agua por persona recordada.