Reciclaje

¡Primer mundo! Holandeses crean los primeros tenis con cuero hecho de mango

Los Países Bajos son el segundo mayor importador de mangos de todo el mundo, con Róterdam como puerto de tránsito
martes, 17 de enero de 2023 · 12:19

Al parecer el veganismo llegó para quedarse y no sólo ha cambiado poco a poco la manera en la que se consume comida, sino también la industria textil o de calzado. Y es que desde hace algunos años hay marcas y diseñadores que han tratado de hacer prendas lo más sustentables y amigables que pueden ser como el ambiente. 

Un ejemplo contemporáneo son el vestido de Miss Tailandia 2023, quien recientemente lució un hermoso atuendo realizado con anillas de lata o también los tenis realizados con nada más que con un cuero, pero no con la piel de ningún animal, sino con los desperdicios de mango, que diseñaron unos jóvenes procedentes de Países Bajos, para evitar el desperdicio. 

Los Países Bajos son el segundo mayor importador de mangos de todo el mundo, con Róterdam como puerto de tránsito y al ver esto, más los desperdicios que se generaban, Hugo de BoonKoen Meerkerk, quienes desde 2015 se pusieron a experimentar y encontraron la manera de crear un calzado y otros productos de cuero, reutilizando la fruta que se desperdicia. 

¿Cómo surgió la idea de hacer cuero con fruta?

"Al principio habíamos visto el enorme problema, primero en el mercado de Rotterdam con todos los desechos de fruta y después, vimos una fotografía en el Puerto de Rotterdam, donde siempre hay mucha fruta que se desperdicia, así que notamos el enorme potencial del desperdicio de fruta a nivel mundial", aseveró Koen en una entrevista para el Foro de Diseño de Finlandia. 

¿Cómo hacer cuero con mango?

"Esto es cuero de frutas y el proceso técnico de lo que hacemos es: Recolectar la fruta descartada, empezamos en el mercado de Rotterdam y desarrollamos un proceso que consiste en deshuesar los mangos, con todo y cáscara y la convertimos en una pasta, como si hiciéramos un smoothie de mango gigante (...) y despuès le agregamos conservadores y aditivos naturales para incrementar su durabilidad y tiempo de vida", explica Hugo. 

Para dicho proceso, se llevan miles de kilos de mangos y según explican, la mezcla con conservadores, se coloca sobre una placa de vidrio para después secarla en un horno industrial para obtener hojas de 60 por 40 centímetros para después poder pintar el material, conservar su color natural o darle cualquier acabado para que las personas quieran gastar su dinero ahí, como es el caso de los tenis, bolsas o tapicería; todo amigable con el ambiente.