Conoce la cocina de Frida Kahlo y cuál era su platillo favorito

Este 6 de julio celebramos el natalicio de la reconocida artista y activista mexicana Frida Kahlo, quien supo exponer parte de la cultura y riqueza de México en el extranjero, llenando de color y folclor aquello que la rodeaba. Y esto ocurría en todos los aspectos de su vida, incluyendo la cocina, un espacio que la pintora tenía decorado de una forma muy tradicional como todo su hogar, el cual es conocido como La Casa Azul.

Enclavada cerca del centro de Coyoacán, barrio del cual era originaria la pintora, esta casa es actualmente el Museo Frida Kahlo, un espacio abierto al público donde además de albergar parte de su colección de pinturas, se pueden conocer de cerca los espacios en los que vivía la pintora. Entre lo más destacado, se encuentran su recámara, su estudio y por supuesto, su cocina, donde resaltan utensilios de barro, madera y piedra volcánica.

El estilo tradicional mexicano resalta entre el colorido intenso, las jarras y ollas de barro tradicional o barro verde de Santa María Atzompa, figuras tejidas con carrizo, vasijas de Olinalá, vidrio soplado, calaveritas y figuras de papel maché, entre otros detalles típicos del país. Lo mismo destacan la mesa y sillas de madera, un fogón tradicional con sopladores tejidos, molcajetes y metates al estilo más tradicional de la época.

¿Cuál era la comida favorita de Frida Kahlo?

Si bien, Frida no disfrutaba tanto cocinar, sí amaba la cocina mexicana y degustar los platillos más tradicionales de nuestra gastronomía. De acuerdo con el testimonio de Guadalupe Rivera Marín, hija de Diego Rivera, los dos artistas amaban la comida nacional, por lo que en la Casa Azul se servían algunos guisos tradicionales como los huauzontles, un tipo de quelite muy típico de esta época.

Los moles, y en especial el manchamanteles, era el platillo favorito de su padre, pero también se servían otras preparaciones como el arroz, los chiles en vinagre, el pipían, los gusanos de maguey con guacamole y por supuesto los tacos, pues ahí nunca faltaban las tortillas. En cuanto a Frida Kahlo, su platillo favorito era el mole con pato, que en aquella época se cazaba en el barrio de Ixtapalapa.

Los dulces tampoco fallaban y entre los postres favoritos de Kahlo destacaban el dulce de coco y el camote con piña. Sin duda, celebrar con algún platillo de la cocina mexicana será rendirle honor a una de las grandes representantes de nuestra cultura en el mundo, y si quieres conocer más de esta increíble pintora, no te olvides de visitar el Museo Frida Kahlo donde podrás ver en vivo y a todo color su hermosa cocina.