Álex Kaffie recuerda con cariño su primer trabajo cerca de este emblemático restaurante de la CDMX

Álex Kaffie es un periodista de espectáculos que ha pasado gran parte de su vida documentando los chismes y primicias del mundo de la farándula, donde nos ilustra con noticias de esta área, muchas veces antes  de que lo sepa todo el mundo. Es decir, de lo que ocurre tras bambalinas y cualquiera pensaría que su vida ha sido muy sencilla y que nació para hacer esto o que siempre ha tenido el lugar que actualmente ocupa en los medios de comunicación, pero no ha sido así.

Y es que por medio de una entrevista que concedió a un reportero de uno de los matutinos más importantes de la televisión abierta él reveló que su primer trabajo de toda su trayectoria profesional ni en un diario, ni en una televisora, sino en un puestecito donde le ayudaba a un señor que vendía tostadas en el centro de la Ciudad de México. Él era un mozo que se encargaba de abastecer los botes de salsa. 

Con nostalgia el ahora también conductor de Sale el sol, recordó que era justo al lado del Café de Tacuba, donde el señor se ponía todos los días a vender sus antojitos mexicanos y que ocupaba la ayuda de Kaffie para abastecer los botes de salsa y guisados para los clientes y además se encargaba de ir por el cambio y de despachar el refresco para ganarse sus primeros pesos y además apoyar al gasto de la casa. 

¿Cuál fue el primer trabajo de Álex Kaffie?

Contó que de más joven se le hacía agua la boca oler los aromas despedidos de la cocina del que entonces era uno de los restaurantes más prestigiosos de la Ciudad de México y donde recordó haber conocido aunque sea de vista a Irma Serrano, 'La Tigresa', cantante, actriz y política mexicana, quien asistió al Café de Tacuba a comer, pero que no compró tostadas. De hecho aseguró que se asomaba por el aparador a ver la comida de ahí.

Álex Kaffie platicó  que "Yo me asomaba por el aparador y me acuerdo, ya sabes uno de niño, ¿verdad?, le dije: Mamá, mamá cómprame una fruta cristalizada" a lo que ella le respondió que no le alcanzaba el dinero para eso, pues no ganaba lo suficiente, pero después, cuando cobró su primera quincena en otro empleo, decidió invitar a su madre a comer en el restaurante que tantos recuerdos le trae. 

Actualmente él no sabe qué fue del señor que le abrió las puertas para trabajar con él durante ése tiempo, pero que guarda muy buenos recuerdos de esos momentos pasados en la calle de Tacuba, una de las más emblemáticas que tiene el centro histórico de la capital del país, o sea, la CDMX. La anécdota la compartió a través de su Twitter y francamente nos dejó con antojo de tostadas.