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Así nació la tradición de bendecir panes el día de San Antonio de Padua

Conoce la tradición de San Antonio de Padua, el famoso santo que ha traído varios milagros
lunes, 13 de junio de 2022 · 12:19

Este 13 de junio, es conocido por los feligreses y seguidores de la religión como el día de venerar al famoso santa San Antonio, quién para todos aquellos que no están muy relacionados con la religión, se trata uno de los santos más populares del culto de la Iglesia Católica a San Antonio de Padua, el cual cobró gran popularidad a partir del siglo XV, reconocido por santo de "las causas perdidas", entre ello los objetos perdidos y protege a las mujeres estériles, viajeros, pobres, albañiles, panaderos y papeleros.

Pese a todo lo mencionado, que en sí ya es popular, en realidad es sumamente reconocido por todos, por ser el santo que ayuda a los solteros que buscan pareja y desean casarse. Esto, es sumamente popular en nuestro país, porque se tiene como tradición colocarse de cabeza y solo se regresa hasta que el santo haya realizado el milagro de encontrarle pareja, cosa que para muchos ha funcionado. 

¿Cuál es el origen de la leyenda? 

Sin embargo, esa no es la creencia que nos trae, de manera original aquí, porque realmente lo que nos tiene en este momento, en esta nota y con la historia de por medio; es la famosa historia del pan de San Antonio de Padua que tiene por bendecir los panes. Esta famosa tradición, conocida como el pan de los pobres o pan de San Antonio, se remonta a un episodio que tuvo lugar, precisamente, en la ciudad de Padua

De acuerdo a la leyenda, se dice que una madre vivía cerca de la Basílica del Santo que estaba construyendo, dejó solo a su hijo de año y medio solo en la cocina, sin pensar que el pequeño podría hacer algo contra su vida, lamentablemente este caería dentro de una tina llena de agua. Al llegar la madre a la cocina, tristemente encontró al pequeño sin vida y como era de esperarse, su reacción fue entre lagrimas y gritos imploró al Santo hacerle el milagro de devolvérselo.

A cambio del milagro, ella comenzó a invocarlo, haciéndole un voto, que si obtenía la gracia daría para los pobres tanto pan como pesaba su hijo. La gracia le fue concebida y de esta forma se instituyó la obra de beneficiencia, cuando fue instituida en Albuñuelas en el año de 1898, ya era toda una tradición en Padua