Día del Nacho en México: Conoce la historia de esta característica y popular botana

México es uno de los países que tienen mayor diversidad gastronómica y la verdad es que no sólo hay grandes platillos que ponen en alto el nombre del país en cualquier lugar del mundo, como en el caso del mole, los chiles en nogada y el arroz rojo o a la mexicana. Pero hay que decir que toda buena gastronomía, tiene buenas botanas también. Aunque en nuestro país, eso sobra, pues lo que hay que saber es que no son difíciles de hacer. 

Las botanas y las bebidas casi siempre han llevado una muy buena relación, sobre todo, porque casi siempre se ingieren pues cuando estamos rodeadas de nuestras amistades, mientras platicamos, ya sabes, como lo acostumbrábamos de viernes social, en aquellos bares de la universidad o incluso hasta hace 2 años antes del confinamiento de la pandemia de Covid-19, cuando nos veíamos con las amigas y/o compañeros del trabajo para desahogarnos de los problemas de la semana. 

Y entre todas las botanas posibles que puedes comer, una de la más socorridas, casi siempre son los nachos. Sí, esos totopos con queso o guacamole, que te puedes comer cuando juega tu equipo favorito de futbol, cuando te visitan tus amigos o simplemente la tarde que eliges para ver tu película o episodio de tu serie favorita, porque de verdad que son una botana tan versátil, que ya han hasta cruzado algunas fronteras, como la de Estados Unidos, donde además se convirtieron hasta en un antojito Tex-Mex.

¿Cuál fue el origen de los nachos?

Pero como en México no podíamos quedarnos atrás para celebrar a esta botana, que es todo un clásico, pues desde hace algunos años se celebra a nivel nacional a los nachos, porque lo creas o no, ya tienen muchos ayeres acumulados, pues hay indicios de que surgieron por allá de 1943, cuando se empezaron a servir con guacamoles, queso y jalapeño.

Se cree que fuer en la ciudad de Piedras Negras, Coahuila, donde un pequeño restaurante llamado El Moderno, recibió a varias esposas de militares estadounidenses, a pesar de que el establecimiento ya había cerrado, por lo que el chef Ignacio Anaya, se vio forzado a buscar algo para servirles, así que preparó un platillo con lo que tenía disponible por ahí. Este plato fue servido con queso y elote acompañados con totopos.

Sin embargo, otras versiones de la historia dicen que el nombre surgió gracias a que cuando le preguntaron el nombre al mesero, este respondió "Nacho", sin entender que se referían al platillo y ya de ahí, pues todos le empezaron a decir así a esta preparación, dándole una gran popularidad, pues los empezaron a llamar "nachos" y son tan fáciles de hacer, que incluso en Estados Unidos se pueden encontrar.