¿Por qué sabe mejor el recalentado? Esta es la explicación científica

El 25 de diciembre y el 1 de enero regularmente son fechas "oficiales" de recalentado, un término que se usa en México de forma coloquial para señalar la comida que quedó de una fiesta, se calienta al día siguiente para volverla a disfrutar. Y es que el 24 de diciembre se suelen preparar los platillos más complejos del año y que no consumimos regularmente, como el pavo relleno, la pierna adobada, el bacalao a la Vizcaína o los romeritos.

Por esta razón, también es muy común que haya tantos sobrantes de comida, y en nuestro país no es tan común desecharla, sino que se aprovecha incluso en nuevas preparaciones. Aún así, hay quien "le hace el feo" al recalentado, básicamente por aburrición, porque no quieren volver a comer lo mismo; sin embargo, también ocurre que, como magia, una vez que pruebas un bocado no puedes parar de comer por su exquisito sabor.

¿Por qué sabe mejor el recalentado? Es una pregunta seria y que seguramente te has hecho antes. Puede incluso que le hayas dado varias respuestas posibles, por ejemplo que se debe a la grasita acumulada o del sazón de mamá, pero ¡no! Detrás de cada gran recalentado existe un fenómeno químico y bastante interesante que le da ese sabor extra a la cena del día anterior, y que acá abajo te explicamos.

¿Por qué sabe mejor el recalentado?

Una vez más la ciencia "sale al quite" y explica que durante el recalentado ocurre un fenómeno químico en el que entra en juego la composición de los alimentos.

De acuerdo con científicos y expertos en gastronomía, cuando los alimentos se colocan de nuevo en el fuego, los líquidos contenidos en la comida se modifican y esto hace que nuestros platillos tengan un sabor aún mejor que la noche anterior.

A esto se suma que la carne del pavo o en general, las fuentes de proteína en los platillos, le dan un sabor extra a los alimentos durante el recalentado, debido al colágeno que sigue descomponiéndose hasta 30 minutos después de que se retiró del fuego, por lo que podrías estar dando un primer bocado al recalentado y aún el alimento se estaría cocinando en teoría.

Esto se debe a que el colágeno toma la consistencia de gelatina cuando se refrigera y una vez que se calienta se derrite, generando una sensación increíblemente sedosa en el paladar.

De igual manera, los líquidos que corren en el guiso funcionan como una especie de marinado en la que han estado reposando los alimentos, por lo que los alimentos concentran mucho. más sus sabores y es tan importante que al recalentar no se resequen. Por eso, si quieres unos romeritos bien recalentados te damos estos tips.

Así que ahora lo sabes, no fue el amor de mamá, pero igualmente, a ella le debemos que estuviera lista la cena en primer lugar ¿o no?