Gastronomía
3 tipos de flores que no deben faltar en tu ofrenda de muertos este 2 de noviembre
Para esta gran celebración descubre por qué estos elementos ornamentales siempre tienen que estar en tu ofrenda
El Día de Muertos es un festejo muy apreciado en todo México y hay elementos que nunca debes dejar de colocar, como las flores de Cempasúchil, la de terciopelo y la nube. Elementos ornamentales, aquí te decimos por qué
Cempasúchil
Cómo lo vimos en la película de Coco, esta flor es muy importante, ya que sus pétalos guían a las almas hacia las ofrendas, las cuales han sido confeccionadas para honrar su memoria.
Investigaciones de Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera mencionan que “nuestros antepasados asimilaban el color amarillo de la flor de cempasúchil con el sol, razón por la que la utilizaban en las ofrendas dedicadas en honor a sus muertos. La tradición marca hacer senderos con las flores de cempasúchil, desde el camino principal hasta el altar de la casa con la finalidad de guiar a las almas”.
Además, tienes que saber que esta flor es originaria de México y es de temporada, por lo que su amarillo intenso ilumina este gran festejo nacional.
De terciopelo
Es elegante y muy hermosa. Su presencia es necesaria en los altares de Día de Muertos y realza la celebración. También se le reconoce como mano de león, celosía o cresta de gallo.
Se trata de una flor muy colorida y al tacto es muy suave, ya que como su nombre lo dice es parecido al terciopelo.
El Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera explica en sus registros que esta flor se cultiva en diferentes partes del mundo, pero su origen es asiático.
“En México, principalmente en la región centro y sur del país, se ha adoptado la utilización de la flor terciopelo en esta temporada por su llamativo color y textura suave que recuerda a esa tela de tacto velloso y terso, y que sirve de ornamento más a la tradición del Día de Muertos en nuestro país”.
Nube
Esta flor es hermosa en los altares de muertos recuerda que tan frágil es la vida. Sin embargo, la mejor aportación que dan a esa celebración para recordar a los seres queridos que se nos adelantaron en la vida terrenal es su presencia en los altares de los panetones.
“La nube o velo de novia es una planta de flores blancas encantadoras, elegante y delicada que se emplea en arreglos como ornato secundario, suele encontrarse también en color rosa, su duración se prolonga hasta un mes después de su recolección. La nube alcanza entre 90 y 120 centímetros de alto y se compone por numerosos ramilletes de pequeñas flores”.
