5 consejos dados por Greenpeace para hacer tu propia compota en casa

Uno de los actuales problemas en el mundo, es el del Medio Ambiente. Se han buscado muchas formas y maneras de cuidarlo, incluso si checas en el mercado, podrás darte cuenta que la mayoría de los productos ya son renovables.Uno de los más involucrados ante esto, es por supuesto la asociación Greenpeace, que como saben, es una empresa preocupada por el medio ambiente en total plenitud y desde hace mucho pelea por estos temas.

Una manera de dar un paso a favor del planeta, es la de crear tu propia composta y por ello, te dejamos estos increíbles datos que lanzó Greenpeace para que hagas la tuya y pongas tu granito de arena para cuidar al planeta.

Separa tu basura 

Como ya lo hemos mencionado anteriormente, uno de los productos que te pueden ayudar a crear tu composta natural son las cáscaras de huevo. Además de ellas, puedes usar restos de verduras y frutas, residuos de origen animal, tallos frescos y hojas secas. Nada de vidrio, metal, alambres, plástico, caucho, cenizas frescas y frutos con espinas. 

Información de la composta 

Sabemos que con lo adictos que somos a las redes sociales, no será un problema investigar mucho más en los grupos o páginas. Te sugerimos unirte a ellos y checar más detalles, muchas personas ponen sus experiencias con las compostas, incluso, relatan cuál ha sido su favorita. 

Composta a tu medida 

Una composta puede ser un hoyo cavado en el suelo, una bolsa o bote de plástico, depósito de cemento, malla de alambre, acero inoxidable o madera. Esto de acuerdo con información de la Semarnat. 

Así los pasos:

• Vas a colocar una capa de paja de 30 cm de altura a lo largo de la cama  y encima restos de jardinería, viruta o aserrín, desechos de hortalizas. Tienes que humedecer mucho esto.
• Agrega una capa de 15 cm. de restos de comida o de jardinería. Humedece
• Añade una capa de entre 5 y 10 cm de estiércol desmenuzado y humedece
• Alterna otras capas iguales a las anteriores
• No dejes que la composta se seque para evitar invasión de ácaros, hormigas u otros animales. Si se moja en exceso, pueden proliferar los hongos y despidir mal olor
• Voltea la composta a los 15 días y luego cada semana. Cuida que la temperatura se mantenga entre los 50 y 60 oC. Si no aumentó el calor, voltea nuevamente y agrega tierra, agua, estiércol o residuos verdes. Mantén un equilibrio entre material verde y seco. Adiciona tierra para que los microorganismos  aceleren el proceso
• Una vez lista la composta, almacena en costales y guárdalos en un lugar seco hasta que los utilices para fertilizar tu huerto casero o tus macetas.

Sin malos olores 

Una recomendación que te da Greenpeace, para que no existan los malos olores en tu composta, es que cortes en pequeños pedazos, como un máximo de 3 cm de longitud para que se puedan procesar de una manera mucho más rápida y tenga suficiente ventilación. Si la composta será en exterior, cúbrela con una capa gruesa de hojas y ramas trituradas finamente.

Intenta hasta que salga 

No te desanimes si la primera vez que intentas tu composta no sale, aquí la idea, como en la vida, es intentar hasta que nos salga. Darte por vencido tampoco es opción, además la experiencia que te genera esto, será muy interesante. Recuerda que estás poniendo tu granito de arena con el medio ambiente.