Carne de cerdo
5 mitos sobre la carne de cerdo que tienes que dejar de creer
De la carne de cerdo existe información falsa sobre lo dañino que puede resultar para la salud de las personas; sin embargo, esta proteína tiene mucho más ventajas de las que te imaginas, conoce los mitos y realidades
Alrededor de la carne de cerdo se ha dicho mucho, por ejemplo que es mala para la salud, o que es muy grasosa; sin embargo, no todo esto es cierto y consumirla podría ser de los mejores aciertos en tu alimentación. Conoce los mitos y verdades de esta deliciosa proteína.
Uno de los mitos más conocidos es que la carne de cerdo es muy grasosa. La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Social desmintió este dato y aseguró que tiene cantidades de grasa variables según sea el corte.
La dependencia explicó que el cerdo aporta grasas poliinsaturadas que ayudan a mantener bajos los niveles de colesterol. Dentro de los cortes con poca grasa están el lomo, la pierna, filete y solomillo.
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También se ha dicho que consumir la carne de cerdo provoca cisticercosis y triquinosis; sin embargo, para que esto pase, el animal debió de haberse criado en condiciones antihigiénicas o que la carne se haya consumido cruda o poco cocida. Además, la cisticercosis y triquinosis también se pueden adquirir en el consumo de animales salvajes, frutas o verduras.
Estas infecciones surgen por consumir carne contaminada de las larvas Taenia solium y Trichinella spiralis que causan, en caso de la cisticercosis, quistes en músculos, ojos y en el cerebro; mientras que la triquinosis provoca irritación gastrointestinal, edema periorbitario, dolor muscular, fiebre y eosinofilia.
Bien cocida y con una buena crianza del cerdo, la carne de este animal aporta la proteína que necesitas para realizar tus actividades diarias, por lo cual es otra opción para incluirla en tu dieta.
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