Bodegas mexicanas lanzan el primer etiquetado en braille para sus botellas de vino

En ocasiones es muy sencillo pasar por el supermercado y comprar todas las cosas que necesitamos casi de forma automática, pero muy pocas veces nos detenemos a pensar cuál o cuáles productos cuentan con un etiquetado en braille para que las personas con discapacidades visuales puedan saber con exactitud qué es lo que están comprando. Por esta razón, cada día son más las marcas que se suman a esta campaña de inclusión para hacer que sus artículos sean accesibles para toda la población. 

En este sentido y en el marco del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, celebrado el pasado 3 de diciembre, el Consejo Mexicano Vitivinícola (CMV), MCC Labels y la organización Libre Acceso, lanzaron una iniciativa para que las bodegas asociadas al consejo incluyeran en sus botellas de vino etiquetas en braille, para que personas con discapacidad también puedan formar parte de la cultura del vino. 

A través de una conferencia virtual, directivos del CMV, así como diversas agrupaciones civiles anunciaron la Semana de la Inclusión de Personas con Discapacidad, la cual se llevó a cabo del 1 al 8 de diciembre, señalaron que esta iniciativa busca hacer conciencia entre el público general sobre la importancia de incluir a la minorías dentro de la cultura vitivinícola mexicana, así como generar espacios de trabajo para ellos. 

“Quienes se unieron a esta iniciativa para diseñar y lanzar la primera etiqueta en braille de la historia, esta etiqueta podrá ser usada por todas nuestras bodegas asociadas y la podrán encontrar en puntos de venta a partir de esta semana”, señaló la directora del CMV, Paz Austin.

Por su parte, el secretario del Consejo Mexicano Vitivinícola, Alberto Curis García detalló que "en México existen 7.7 millones de personas con discapacidad, de los cuales 39 por ciento tienen trabajo, por lo que es fundamental hacer conciencia sobre la importancia de generar más espacios inclusivos en la industria y hacer las experiencias aún más sensoriales para que un mayor número de personas tenga acceso a ellas y disfruten del vino mexicano.”

Durante las actividades realizadas durante esa semana, diversas bodegas de vino mexicanas comenzaron a usar etiquetas en braille en todos los vinos vendidos en restaurantes, así como tours sensoriales que cuentan con la ayuda de un intérprete de lenguas de señas. Mientras que otras bodegas, comenzaron con recorridos virtuales en lengua de señas, etiquetados en braille hasta agotar existencias, así como cursos para la formación de sommeliers con discapacidades visuales.