Las hojas de laurel son de esas plantas aromáticas que casi todos tenemos en la cocina, aunque no siempre sepamos todo lo que pueden aportar. En México, es común usarlas para darle sabor a sopas, caldos, guisos y hasta frijoles. Su aroma es un poco intenso, pero agradable, y solo con unas cuantas hojas secas, un platillo puede tener un cambio delicioso.
Además de su uso culinario, el laurel también tiene una historia larga como remedio natural. Ya sea en forma de infusión, en mezclas de hierbas o como parte de algún remedio casero, muchas personas lo utilizan por sus posibles beneficios para la salud. Y sí, entre esos usos se encuentra tomarlo como té antes de dormir.
Pero, ¿de verdad es bueno consumirlo por la noche? ¿Ayuda a dormir mejor, a digerir la cena o tiene algún efecto relajante? Acá te contamos todo lo que sabemos acerca de consumir hojas de laurel en la noche y si en verdad tiene efectos reales si consumes laurel a esta hora. ¡Toma nota!

¿Para qué sirven las hojas de laurel?
El laurel mexicano (Litsea glaucescens Kunth) es una planta originaria del país, y según la Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana de la UNAM, se ha usado principalmente para aliviar molestias del sistema digestivo. Esto incluye dolores de estómago, digestión lenta o pesada, cólicos, espasmos y diarrea. También se toma para calmar la tos seca o muy fuerte.
Una de la forma más común de consumirlas es a través de infusiones o tés. Preparar una infusión de laurel es bastante sencillo. Solo se necesita una taza de agua caliente y una o dos hojas secas. Se deja reposar durante cinco a diez minutos y se bebe tibio. En algunos remedios tradicionales, se combina con ruda, clavo o hinojo para potenciar su efecto.
¿Entonces, es bueno consumir hojas de laurel antes de dormir?
Si sufres de indigestión, hinchazón o malestar estomacal antes de dormir, las hojas de laurel pueden ser una opción natural para aliviarte. Su sabor es suave y no suele provocar efectos secundarios si se consume con moderación (una o dos hojas por taza, una vez al día). Además, su aroma puede generar un pequeño efecto relajante, aunque no funciona como un sedante real.
Eso sí, no se recomienda el consumo excesivo de infusión de laurel, ya que algunas sustancias presentes en sus hojas podrían causar irritación gástrica si se abusa. Tampoco se recomienda para personas embarazadas, en lactancia o con enfermedades del hígado, a menos que un médico lo autorice.
Tomar alguna infusión de laurel por la noche puede ayudar a relajar el estómago después de una comida pesada y calmar la tos nocturna. Sin embargo, aunque muchas personas aseguran sentirse mejor después de beberlo, no hay suficientes estudios científicos que confirmen que el laurel tenga un efecto más fuerte al consumirlo por la noche en comparación con otros momentos del día.