Tener plantas en casa tiene sus ventajas. Desde decorar y purificar el aire, hasta aportar en la cocina. Pero, ¿qué tal si te decimos que una de esas hierbas —muy sencilla de cultivar— también puede ayudarte con el colesterol? Hablamos del tomillo, esa aromática que no solo da sabor a tus platillos, sino que puede mejorar tu salud.
El tomillo es famoso en la cocina mediterránea y también se utilizan remedios caseros. Crece bien en macetas, no exige mucho riego y necesita sol. Y si bien muchos lo usan por su aroma, estudios confirman que su consumo habitual tiene beneficios para el corazón y el colesterol.
Si has usado esta hierba medicinal como remedio casero para enfermedades, esta nota es para ti. Aquí te contamos por qué el tomillo podría regular los niveles de colesterol, cómo puedes incluirlo en tu día a día y qué dicen los expertos al respecto. Sigue leyendo para descubrirlo.

¿Por qué el tomillo puede ayudar a reducir el colesterol?
El tomillo (Thymus vulgaris) contiene compuestos como timol, carvacrol y flavonoides, descritos por su capacidad antioxidante, antiinflamatoria y para regular lípidos en sangre. Un ensayo clínico en 12 personas con colesterol alto probó una combinación de aceite de oliva enriquecido con polifenoles de oliva y tomillo. Tras tres semanas, se reportó una reducción significativa de LDL oxidado en comparación con el aceite de oliva solo.
Por otro lado, estudios en animales reforzaron estos hallazgos. En ratas, el consumo de extracto de tomillo redujo colesterol total, LDL, VLDL y triglicéridos, mientras que un análisis en pavos mostró efectos similares al consumir aceite esencial de tomillo. Estas evidencias sugieren que el tomillo:
- Interfiere en la absorción del colesterol en el intestino.
- Favorece la eliminación del colesterol oxidado.
- Apoya una microbiota intestinal saludable, otro factor clave en el metabolismo de lípidos.

Cómo puedes incluir tomillo en casa
La buena noticia es que puedes cultivarlo fácilmente en una maceta sobre tu terraza, balcón o ventana con sol. Las raíces de tomillo necesitan poca tierra, sol directo al menos 4 horas al día y riego moderado: sólo cuando la capa superior se seque.
Para aprovechar sus beneficios, puedes preparar:
- Infusión de tomillo: Hierve una taza de agua, añade una cucharadita de tomillo seco (o dos ramitas frescas) y deja reposar de 5 a 10 minutos. Bebe de 1 a 2 tazas al día
- comida: Úsalo al sazonar sopas, pescados, verduras u otras proteínas. Su variedad de moléculas orgánicas ayuda a potenciar el plato y tu salud.
- Aceite o vinagre aromatizado: deja macerar aceite de oliva o vinagre con ramas de tomillo. Luego, úsalo en ensaladas para obtener beneficios a diario.