Estas son las diferencias que debes saber sobre el aceite de oliva y el aceite de oliva extra virgen

El aceite de oliva es uno de los ingredientes más utilizados en la gastronomía de la región mediterránea de Europa, pero su uso se ha ido extendiendo a lo largo del mundo, puesto que es uno de los ingredientes no sólo saludables, sino versátiles, porque lo puedes usar no sólo en la comida salada o fresca, como las pastas, ensaladas, sino también en la preparación de algunos postres. 

Sin embargo, seguro te habrás dado cuenta de que en más de una receta a veces dice que debes usar aceite de oliva y en otras el mismo líquido, pero virgen extra o extra virgen. Aunque parece lo mismo, debemos decirte que no lo son. Y aunque los dos se derivan de las aceitunas, tienen algunas diferencias, que probablemente desconocías. 

Lo primero que tienes que saber es que tampoco es un producto nuevo, pues desde la antigüedad se ha extraído a presión de las aceitunas, que son presionadas por el molino. En España, por ejemplo, las instalaciones donde se realiza este proceso, reciben el nombre de almazara, que se ha empleado para usos cosméticos, medicinales, religiosos y para las lámparas de aceite. 

Y aunque el 90% de la producción mundial de olivas, se emplea para hacer aceite, no se suelen comer crudas, debido a la amargura de su sabor y la calidad del aceite depende en gran medida  de la manera en que se macera y se procesa posteriormente. Por ello es que esta parte del proceso se suele vigilar con mucho detalle y cuidado.

De dichos procesos es que se desprenden las principales diferencias entre el aceite de oliva convencional y el aceite de oliva extra virgen y para que no te quedes con la duda, pues ahora te diremos cuáles son, así que ¡toma nota! para que la próxima vez que compres este producto, pues tengas en cuenta todo esto. 

1. El aceite de oliva es más refinado

El aceite de oliva es un aceite vegetal que se obtiene de la extracción de aceitunas mediante procesos mecánicos o químicos. Este aceite se somete a procesos de refinación, que permite eliminar impurezas y mejorar su sabor, aroma y estabilidad. 

2. El aceite de oliva virgen extra no usa químicos

Este tipo de aceite es de mayor calidad y se puede obtener de las aceitunas. Se suele extraer mediante procesos mecánicos, que nada tienen que ver con los químicos o con las altas temperaturas. Por lo tanto, el aceite de oliva extra virgen mantiene todo su sabor y aroma natural, así como sus propiedades nutricionales.