Alimentación y estado de ánimo: Así es como los alimentos pueden afectar tu salud mental I PODCAST

Un tema del que poco se habla es sobre los efectos que tiene la calidad de los alimentos que consumimos en la salud mental. Regularmente solo se mencionan los beneficios físicos, pero todos los alimentos contienen elementos químicos, cuyos efectos, por ser tan sutiles, frecuentemente no se perciben ni se consideran. Pero es importante entender que nuestro cerebro es extremadamente sensible ante cualquier reacción química originada por los alimentos que digerimos.

El cerebro es un órgano que controla las emociones, el pensamiento, la percepción, los estados de ánimo y la conducta; y para su adecuado funcionamiento depende de la energía y nutrimentos aportados a través de la dieta diaria. Este órgano tiene una barrera protectora que selectivamente permite el paso de los nutrimentos para su funcionamiento. Si estos son inadecuados en calidad o cantidad, ocasiona desequilibrios que producen alteraciones en el pensamiento, percepción, emociones, o conductas. 

Los principales neurotransmisores químicos son elaborados por el cerebro a partir de los alimentos que consumimos los cuales son: 

1. Noradrenalina: Interviene en los procesos de atención, respuesta, lucha y huida. Se puede percibir con un aumento en la frecuencia cardiaca. En respuesta a este neurotransmisor el cuerpo libera glucosa al torrente sanguíneo para tener energía disponible.

2. Dopamina: produce una actitud alerta y vigilancia lo que favorece el aprendizaje y actividades motoras. Ayuda a tomar decisiones rápidamente.

3. Serotonina: ayuda positivamente a equilibrar la noradrenalina y dopamina. Brindan sensación de felicidad, bienestar, relajación y ayuda a tener sueño reparador. Puede ser un analgésico natural. Aumenta nuestra capacidad de concentración.

Existen nutrimentos específicos necesarios para la formación de estos neurotransmisores. Principalmente 2 aminoácidos (provienen de proteínas) que el organismo no tiene la capacidad de producir por sí mismo y deben ser consumidos. Estos son: 

1. Tirosina: necesario para la formación de noradrenalina y dopamina 

2. Triptófano: se encarga de producir serotonina.

Es importante comprender que su ingreso al cerebro no es tan sencillo. El triptófano requiere de glucosa para entrar, por lo tanto, los hidratos de carbono tienden a elevar los niveles de serotonina (responsable de la sensación de bienestar). Si desequilibramos el delicado mecanismo que regula el azúcar podemos afectar negativamente el funcionamiento cerebral, ocasionando sueño o hiperactividad, según falte o exceda. Por otro lado, el exceso de triptófano disminuye la comunicación entre las neuronas, y puede producir sueño; ¿lo has notado después de comer grandes cantidades de alimentos?

Comer gran cantidad de esta selección de nutrimentos no basta para hacernos felices. Lo aconsejable es consumir alimentos que pueden aportar los nutrimentos en su forma más pura y menos procesada. Una dieta con suficiente proteína en las comidas principales es un primer paso.

En conclusión, nuestra dieta puede ser un factor que influye en el estado emocional y condicionar nuestro humor, puede potenciar o mermar nuestro rendimiento intelectual o físico. A través de los alimentos que ingerimos podemos modificar nuestra química interna y con ello generar transformaciones inesperadas.

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mgm