Proteína de insectos, ¿cuáles son sus ventajas según la ciencia?

Últimamente para todo se escucha mucho acerca de la proteína, que si es buena para que los niños crezcan lo suficiente, que si es necesaria cuando quieres hacer músculo e incluso para bajar de peso. Sin embargo, también los nutriólogos señalan que no se debe exceder del consumo de carnes, una de las fuentes más importantes de proteína de alto valor biológico, por su alto contenido de grasas saturadas.

A cambio, se ha recomendado aumentar el consumo de otro tipo de proteínas como las legumbres; no obstante, algunas personas muestran inflamación y gases intestinales debido a su ingesta, al tiempo que no todas aportan todos los aminóacidos esenciales, por lo que se debe cuidar la suplementación o complementar con otros alimentos. ¿Y qué pasa con los insectos?

Aunque no se hable mucho de los insectos como una buena fuente de proteína, en distintas regiones de América Latina, Asia y África se consumen regularmente debido a su alto nivel nutricional y como parte de la cultura gastronómica. En México por ejemplo, es muy común comprar grillos como botanas o para hacer tacos o salsas, pero ¿sabes lo que realmente aportan?

Las ventajas de comer insectos

De acuerdo con un artículo de los investigadores de la UAM, Salvador Osvaldo Cruz López y Yenizey Merit Álvarez Cisneros, "los insectos son una fuente rica en proteínas de bajo costo", por lo que incluso la Organización de Agricultura y Alimentos de las Naciones Unidas (FAO, por sus siglas en inglés) ha sugerido su consumo como una fuente alternativa de proteína animal, especialmente en países de bajos recursos.

La segunda ventaja es que los insectos no requieren de grandes extensiones de tierra y en consecuencia, generan menor cantidad de gases de efecto invernadero en comparación con la crianza animal, por lo que se podrían considerar una alimentación mucho más sustentable para el planeta.

Y la tercera ventaja es que los insectos, como una fuente de proteína no convencional va en aumento por tener altos porcentajes de este macronutriente de buena calidad, pero también por sus propiedades nutricionales, ya que son ricas en ácido linoleico, ácido palmitoleico y ácido oleico, entre otras grasas saludables.

Los insectos, aportan minerales como hierro, zinc, fósforo, potasio y magnesio, además de vitaminas B1, B2, B12, así como fibra, un alto contenido de quitina y triptófano, entre otros micronutrientes.

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