Ingesta de productos procesados incrementaría el desarrollo de la enfermedad de Crohn

Inflamación del tracto digestivo, dolor abdominal, fatiga y pérdida de peso sin razón aparente, diarrea grave y malnutrición, son algunos de los signos de alerta de la llamada enfermedad de Crohn, la cual suele afectar zonas diversas del sistema digestivo. Esta enfermedad puede llegar a ser muy dolorosa y debilitante para quien o quienes la padecen, pero por desgracia aún no hay una cura, aunque sí existen tratamiento para mejorar la calidad de vida de los pacientes. 

De acuerdo a los señalado por el portal Medline Plus, la enfermedad de Crohn es una de las formas de la enfermedad intestinal inflamatoria (EII), aunque las causas son desconocidas, se trata de una afección que se presenta cuando el sistema inmune ataca por error al propio cuerpo y destruye el tejido corporal sano. Entre los factores más comunes de esta enfermedad se encuentran los genes familiares, factores ambientales y el tabaquismo. 

Alimentos inflamatorios y la enfermedad de Crohn

Como bien lo mencionamos, aún no existe una cura para revertir los efectos de la enfermedad de Crohn, es por eso que hasta la fecha se llevan a cabo diversos estudios para poder determinar con exactitud sus causas o la forma correcta para tratarla y ayudar a quienes la padecen a llevar una mejor calidad de vida, es por eso que el último estudio dado a conocer relaciona la comida inflamatoria con esta afección. 

Según lo dado a conocer por la Universidad de Medicina de Harvard, un análisis sobre la dieta rica en alimentos inflamatorios, es decir, productos procesados, dulces y granos refinados, está asociada con diversos problemas de salud entre los que se encuentran el riesgo de cáncer de colón, enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y diabetes. Sin embargo, uno de los resultados que más llamó la atención de los especialistas fue la relación de este tipo de dieta con la enfermedad de Crohn. 

El estudio publicado por Gastroenterology, señala que los investigadores realizaron una evaluación sobre 30 años de información sobre el tipo de dieta de más de 208 mil hombres y mujeres. En comparación con la información de personas que señalaron llevar una dieta baja en alimentos inflamatorios, se encontró que quienes consumen mayores cantidades de comida inflamatoria, hay un 51% más de riesgo de llegar a desarrollar la enfermedad. 

Mientras que, el riesgo de padecer la enfermedad de Crohn se duplicó en aquellas personas que pasaron de una dieta baja en productos inflamatorios a un consumo alto de los mismos. Aunque dicho estudio solo es observatorio, no hay pruebas concretas de que los alimentos inflamatorios puedan desencadenar la enfermedad, sin embargo, son otro tipo de riesgos los que hacen que los especialistas hagan una alerta sobre su consumo y las consecuencias que pueden llegar a tener en la salud. 

Es por eso que en más de una ocasión hemos escuchado las recomendaciones y los beneficios de llevar una dieta balanceada, a la que se integren productos integrales, sin azúcar agregada, así como el alto consumo de frutas, verduras, legumbres, pescados, aves, lácteos, nueces y semillas. Además de poner atención a la actividad física que se realiza de forma regular, la cual también debe ser parte de nuestra rutina de alimentación.