5 razones saludables y económicas para consumir pescados y mariscos en Cuaresma

En la época de calor y en especial durante Cuaresma, hay un aumento en el consumo de pescado en el país, pues es un alimento fresco, más económico en esta temporada y con el que se pueden realizar diversas recetas. En México se cuentan con más 11 mil kilómetros de litorales donde existe una gran variedad de peces para consumo humano.

Hasta el 2019, el país se colocaba en el escalón 17 de la producción pesquera a nivel mundial debido a la enorme importancia de esta industria que registra la captura de más de dos millones de toneladas de peces y da trabajo a más de 162 mil hombres y mujeres dedicados a esta actividad alimentaria, lo cual se suma a la importancia de este producto en una dieta saludable.

Entre las especies más consumidas en el país destacan la sardina, el camarón, la mojarra y el atún, aunque también forman parte de la dieta de los mexicanos otras especies como la cintilla, el conejo, la lebrancha, el jurel, la cojinuda, el besugo, la sierra, el peto, el cazón bandera, la trucha, el bagre, la carpa, el jolote y la lobina negra. ¿Quieres saber por qué es bueno consumir pescado?

5 razones para consumir pescados y mariscos en Cuaresma

1. Por su proteína

Las proteínas son macronutrientes que necesita nuestro organismo para cumplir diversas funciones como formar y reparar tejidos, transportar vitaminas o jugar un rol fundamental en las defensas del cuerpo ante agentes invasores. Si bien las proteínas se pueden adquirir de otras fuentes de alimentación, existen ciertas desventajas.

Por ejemplo, en las legumbres no siempre se encuentran todos los aminoácidos necesarios, es decir, las unidades básicas de la proteína, por lo que se debe complementar la dieta con otros alimentos o suplementos. En el caso de las carnes rojas, el problema es que aportan demasiado colesterol malo (LDL), mientras que el pescado es una fuente de proteína saludable y con ácidos grasos Omega que son ideales para la salud.

2. Disminuyen el colesterol

El pescado es una carne de más fácil digestión para el organismo, además de que algunas variedades son una fuente importante de ácidos grasos Omega, los cuales contribuyen a disminuir el colesterol malo (LDL) de la sangre y aumentan el colesterol bueno (HDL), además de que contribuyen a retardar el proceso de acumulación de placa de grasa en las arterias. Lo único que hay que tomar en cuenta es cómo se va a preparar para no aumentar las cantidades de grasa que naturalmente tienen.

3. Previenen enfermedades cardiovasculares y diabetes

Debido a lo que te comentamos en el punto anterior, además de vitaminas, minerales y otros nutrientes que componen a los pescados, son un tipo de alimento ideal para prevenir enfermedades cardiovasculares y diabetes.

Existen algunos estudios que han concluido que el consumo de pescado de forma regular se asocia a un menor riesgo de desarrollar diabetes, mientras que la alimentación que llevan las personas que consumen este tipo de carne se complementa con patrones alimenticios saludables que previenen la obesidad y otras enfermedades no transmisibles.

4. Alimenta el cerebro

Existen alimentos que son ideales para alimentar al cerebro, un órgano que requiere de nutrientes específicos para llevar a cabo procesos como la concentración, el rendimiento intelectual y la memoria. El pescado y los mariscos destacan por su contenido de zinc, fósforo, vitaminas A, B12 y ácido fólico, las cuales son necesarias para proteger la salud cognitiva y prevenir enfermedades como Alzheimer.

5. Fortalece el sistema inmunológico

Existen pescados con aporte de vitamina D, como las especies azules, que son un micronutriente necesario para fortalecer las defensas, pues se ha determinado que los niveles saludables de esta vitamina están asociados a una menor probabilidad de contagiarse de Covid-19 y a una recuperación más efectiva del nuevo coronavirus.

Debido también a su contenido de ácidos grasos Omega 3, a su aporte de proteínas de alto valor biológico, vitaminas del grupo B, A y C, comer pescado contribuye a fortalecer el sistema inmunológico, a mejorar el funcionamiento de los sistemas respiratorio y nervioso y a absorber mejor los nutrientes porque beneficia al sistema digestivo.

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