Originaria de Italia y prácticamente la sensación en todos los salones de fiesta, la pasta es uno de los alimentos que tiene más versatilidad a la hora de prepararse. Puede hacerse en sopa con caldito de jitomate, en fideos o fría y con diferentes tipos de salsa, como la Alfredo, la bolognesa, la de quesos y un larguísimo etcétera. Verdaderamente se lleva super bien con un montón de ingredientes, que quizá ni lo hubiéramos imaginado.
Los que vivimos solteros es de lo primero que aprendemos a cocinar. Sin embargo, eso no quiere decir que no se pueda sofisticar, claro que se puede y de hecho, producto de eso ha salido la legendaria lasagna, la sopa fría, que nos comemos en navidad, que a veces lleva piña y jamón y otras no, pero siempre, siempre le da un realce al plato fuerte que nos llevamos a la boca, que en su mayoría casi siempre es carne, llámese lomo de cerdo, pavo o bacalao con algún tipo de salsa o gravy.
Aparentemente la pasta se ve como un platillo pesado que engorda y la verdad es que si la comes con medida, esto no pasa. Sin embargo, algunas personas le han creado mala fama y han provocado que otros dudemos a la hora de comerla. Pero, a pesar de esto, la verdad es que los expertos la han estudiado a fondo y es por eso que hoy te daremos 3 buenas razones para que le pierdas el miedo y le entres con gusto ¡Toma nota!
1. Te da mucha energía
Gracias a que cuenta con un buen porcentaje de carbohidratos, la pasta es un alimento que de comerla en la tarde o en el recalentado de la mañana, nos dotará de energía para seguir la fiesta. Además, nos brinda la sensación de saciedad, porque también contiene fibra y algunos minerales como manganeso, selenio, fósforo, hierro y vitaminas del grupo B. Es importante recalcar, que si tienes tiempo, siempre opta por preparar tú mismo tu pasta, pues la textura es mejor y resulta más saludable.
2. Disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares
Esto no lo decimos nosotros, lo dicen varios estudios científicos. Y es que si la pasta está hecha con cereales integrales, como el trigo, que normalmente es el que predomina, este alimento se ha asociado con un riesgo menor de padecer enfermedades cardíacas, diabetes y hasta obesidad. ¡Pero cuidado! Si comes demasiada, puedes sentirte muy pesada. El secreto está en la cantidad de tus porciones.
3. Es baja en azúcares
Cuando decimos que la pasta no engorda no sólo es porque una taza de ella contenga menos de 200 calorías con apenas en un gramo de grasa, lo hacemos también, porque este alimento tiene un índice glucémico bajo, casi al igual que algunos panes elaborados con multicereales, como la avena, manzana, naranja, maíz o garbanzo. Si te estás cuidando de esto, más vale que busques un receta neutra.
