El consumo de café y té podrían disminuir el riesgo de desarrollar demencia: Estudio

Aunque en el pasado ya se han realizado análisis respecto al riesgo de tomar mucho café y desarrollar demencia, un nuevo estudio investigó las asociaciones del café y del té, por separado y combinados, con el objetivo de descubrir cuál es el riesgo de desarrollar un accidente cerebrovascular y demencia, enfermedades que se están convirtiendo en un problema de salud mundial cada vez mayor, además de ser una pesada carga económica y social para la población del planeta.

El estudio publicado en la revista especializada Plos Medicine, incluyó a más de 365 mil participantes de entre 50 a 74 años de edad, pertenecientes al Biobanco del Reino Unido, quienes informaron sobre su consumo de café y té a partir de 2006 a 2010. Éstos, fueron observados hasta 2020 para determinar la aparición de la nueva enfermedad y descubrieron que sí existía una incidencia entre el consumo de estas bebidas y el mayor o menor riesgo de sufrir demencia.

Tras estimar las asociaciones de consumo de café / té y el accidente cerebrovascular y la demencia, ajustando diversos factores incluyendo la edad, el sexo, el peso y antecedentes de enfermedades metabólicas y crónicas, se observó que 5 mil 79 participantes desarrollaron demencia y 10 mil 53 participantes sufrieron un accidente cerebrovascular durante una media de 11.4 años en los que se realizó el estudio.

Café y té podrían disminuir el riesgo de sufrir demencia

Usando modelos de riesgos proporcionales de Cox, los investigadores descubrieron lo siguiente:

* Que la ingesta de café de 2 a 3 tazas al día o la ingesta de té de 3 a 5 tazas al día o su ingesta combinada de 4 a 6 tazas diarias se relacionaron con el índice de riesgo (HR) más bajo de accidente cerebrovascular y demencia incidentes.

* Beber de 2 a 3 tazas de café con 2 a 3 tazas de té al día se asoció con un 32% menos de riesgo de accidente cerebrovascular y un 28% menos de riesgo de demencia.

* La ingesta de café solo o en combinación con té se asoció con un menor riesgo de demencia tras sufrir accidente cerebrovascular.

Estos hallazgos destacaron una posible relación beneficiosa entre el consumo de café y té y el riesgo de accidente cerebrovascular y demencia, así como de demencia posterior a un accidente cerebrovascular.

Las limitaciones de este estudio se centran dos factores principales, por un lado que la ingesta de estas bebidas fue autoinformada y podría no reflejar patrones de consumo a largo plazo o estar sesgada, y por otro, que se trata de una cantidad de participantes limitados del Biobanco del Reino Unido, que no son representativos de toda la población del Reino Unido o de otras partes del mundo.

Sin embargo, los hallazgos de este nuevo estudio resultan bastante interesantes respecto al consumo de dos de las bebidas más consumidas en el mundo, y que pueden dar luz acerca de enfermedades que se están enfrentando con más fuerza en la actualidad.