Este martes 29 de septiembre celebramos el Día Mundial del Corazón, una fecha que nos recuerda la importancia de este órgano y la urgente necesidad de aprender a cuidarlo mejor.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Cardiología, los padecimientos cardiovasculares son la primera causa de muerte en nuestro país. Tan solo el año pasado se atribuyeron el 32.14% de los descensos relacionados a enfermedades cardiacas a la isquemia del corazón, 23.81% a malformaciones congénitas del sistema circulatorio y el 14.29% a enfermedades reumáticas del corazón.

Una  gran proporción de estas muertes podría evitarse con una alimentación saludable que reduzca el consumo de sal, con ejercicio físico y evitando el consumo de tabaco, según indica la Organización Panamericana de la Salud, por lo que, especialmente este año, promover y facilitar estos estilos de vida saludables requiere la existencia condiciones que faciliten el acceso a alimentos frescos y naturales, entre otros factores.

La importancia de la alimentación

Algunas de las recomendaciones generales que emite el Instituto Mexicano del Seguro Social en materia de alimentación son limitar las sales, las grasas saturadas y el colesterol, es decir, disminuir el consumo de carnes rojas, leche entera y huevos. También se recomienda llevar una dieta rica en frutas y verduras, legumbres, cereales integrales y pescados.

Para cumplir con estas especificaciones, Gasatrolab trae para ti 7 hábitos alimenticios que, al mismo tiempo, te ayudarán a cuidar de la salud del órgano más importante de tu cuerpo.

1. Prueba la dieta mediterránea

Lo maravilloso de esta dieta es que puede reducir hasta un 30% el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Este estilo de alimentación se basa en los ingredientes propios de  la agricultura local de los países con clima mediterráneo. Se resume en reducir el consumo de carnes e hidratos de carbono en beneficio de más alimentos vegetales y grasas monoinsaturadas. Las verduras. legumbres, fruta, pescado, carnes blancas, frutos secos, arroz y un poco de vino son alimentos permitidos en esta dieta.

2. Consume alimentos con Omega 3

Los ácidos grasos omega 3 han sido relacionados con un efecto protector frente a diversas patología como arteriosclerosis, hipertensión y afecciones cardiovasculares. Esto ha sido confirmado por la American Heart Associaton, que afirma que las grasas buenas, entre las cuales se encuentran los ácidos Omega 3 como el EPA y el DHA, ayudan a mantener la salud del corazón.

3. Reduce el consumo de sal

La OMS recomienda reducir la ingesta de sodio para reducir la tensión arterial y el riesgo de enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares y cardiopatía coronaria en adultos.

Según el mismo organismo, el consumo de sodio en los adultos a menos de 2 g/día (5 g/día de sal).

4. Cuida el peso corporal

Resulta fundamental mantener un peso corporal menor al 25 del índice de grasa corporal. ¿por qué? Otras enfermedades, como la hipertensión arterial, dislipidemias y obesidad, son factores de riesgo que elevan la probabilidad de presentar padecimientos del corazón.

5. Equilibra el consumo de grasas

Algunas grasas saturadas y trans perjudican el control del colesterol y aumentan el riesgo cardiovascular. Las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas tienen efectos beneficiosos. Estas últimas incluyen ácidos grasos esenciales que no se pueden sintetizar en el cuerpo, sino que tienen que ser obtenidos a través de los alimentos.

6. Come más pescado

Una de las maneras de prevenir las enfermedades cardiovasculares es incluir en la dieta pescados de carne oscura, por lo menos, tres veces a la semana por lo que la caballa, el jurel, la anchoveta y merluza pueden ser una buena opción para incluir en el menú.

7. Reduce el consumo de alcohol y tabaco

Como ya lo habíamos mencionado, el tabaquismo resulta perjudicial para nuestro corazón pues puede disminuir el colesterol “bueno” (HDL), aumentar los triglicéridos, dañar las células que recubren los vasos sanguíneos, aumentar la acumulación de placa, hacer que la sangre se vuelva pegajosa o causar engrosamiento y estrechez de los mismos. También puede hacer más probable que se formen coágulos, lo cual puede bloquear el flujo de sangre al corazón y al cerebro.

Pero el consumo de alcohol en exceso también podría significar un grave peligro ya que puede debilitar el corazón y causar una enfermedad denominada miocardiopatía dilata (el corazón se dilata y disminuye la fuerza de "bombeo"), provocando síntomas de insuficiencia cardiaca.

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