La vitamina E es posiblemente una de las más utilizadas por la industria cosmética para enriquecer sus productos. Debido a que es un  nutriente liposoluble con múltiples antioxidantes, es innegable que resulta una excelente alternativa para cuidar de nuestro aspecto, principalmente de la piel.

Sin embargo, tal vez sería prudente empezar a integrar esta vitamina en nuestra vida de manera más natural, ya que una de las grandes maravillas de este nutriente es que se encuentra presente en diversos alimentos que podemos integrar a nuestra dieta para así cuidar de nuestra piel de una forma más natural.

La vitamina E y su uso para lucir una piel radiante

Como ya lo mencionamos, esta vitamina actúa como antioxidante en nuestro organismo, ayudando a proteger las células contra los daños causados por los radicales libres, los cuales son compuestos que se forman cuando el cuerpo convierte los alimentos que consumimos en energía. 

Usualmente también estamos expuestos a estos radicales pues se encuentran en ambientes creados por el humo del cigarrillo, la contaminación del aire y la radiación solar ultravioleta. Es por esto que es de suma relevancia consumir buenas dosis de vitamina E para ayudar a dilatar los vasos sanguíneos y evitar la formación de coágulos de sangre en su interior, así como ayudar a controlar la oxidación de las grasas.

¡Consume estos alimentos y disfruta de sus beneficios!

Las cantidades diarias promedio para gozar de una buena salud y un buen físico dependen de la edad. En el caso de los niños puede ir de 3 a 11 mg, mientras que para jóvenes y adultos lo sugerido son 15 mg. Para cumplir con estas cantidades mínimas puedes disfrutar de los aceites vegetales como el de oliva, girasol, maíz, soja o trigo; o bien, alguno de los siguientes alimentos:

Aguacate: Casi todos los que disfrutan de su sabor también aman comer este alimento por su variedad de grasas saludables. Pero, ¿sabías que este es el alimento que más vitamina E puede aportarte?

Frutos secos: estos deliciosos y pequeños alimentos podrían ser importantes de lo que crees, especialmente para lucir una piel envidiable. Al contener 26 mg por cada 100 g, podrás disfrutar de las dosis necesarias y combinar su característico sabor con cremas de verdura o ensaladas.

Espinacas y espárragos: Además de proveer importantes dosis de vitaminas A, B1, B2, C y K, así como nutrientes como calcio, fósforo,, ácido fólico y magnesio, esta verdura verde, después del aguacate, es la más rica en vitamina E.

Pescados grasos: Y no olvides incluir en tu dieta la caballa, anguila, el congrio, salmón y las sardinas; pues la vitamina E no solo se encuentra en las grasas vegetales, ¡también en las animales!

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