La fibra dietética es la parte no digerible de los alimentos de origen vegetal, tales como verduras, fruta, cereales, leguminosas y semillas. Nuestro organismo no tiene enzimas digestivas para digerir esas fibras y, aunque suene extraño, esto puede ser bastante benéfico para nuestro sistema digestivo, la microbiota intestinal y, por ende, la prevención de enfermedades.
Descubre por qué...
La importancia de las fibras vegetales
Estas fibras vegetales actúan como prebiótico, ayudando a fertilizar las bacterias buenas (microbiota intestinal), que son las responsables de mantener la flora intestinal en balance, lo cual resulta de suma importancia para que las funciones del sistema inmunológico, endócrino y el metabolismo se desarrollen correctamente.
Las fibras y funciones que desempeñen dependen totalmente de su solubilidad. Por esta característica se dividen en tres tipos:
1. Soluble
Es la fibra que se puede disolver en agua, ayuda a la descomposición de los almidones complejos, lo que provoca que la glucosa se libere poco o poco evitando variaciones anormales de la misma. Es por esta característica que este tipo de fibra es ideal para prevenir la diabetes y controlar niveles de colesterol y triglicéridos en sangre.
2. Insoluble
Ésta se encuentra en granos enteros y, como lo indica su nombre, no se disuelve en agua.
Al no ser soluble y no digerirse, es ideal para mejorar la movilidad del intestino colaborando a mantenerlo sano, limpio y con mayor abundancia de bacterias benéficas. Al regular el movimiento del intestino ayuda a prevenir el estreñimiento, la acumulación de toxinas en el intestino y reduce las posibilidades de contraer enfermedades como el cáncer de colon y el rectal.
3. Funcionales
No son tan conocidos pues estos hidratos de carbono no digeribles se extraen de las plantas para formar suplementos que aumentan la ingesta de fibra y coadyuvan con las funciones de las solubles e insolubles.
Es por todo esto que se podría decir que esta fibra es el nutriente más importante para mantener la salud intestinal, bajar niveles de azúcar, colesterol y triglicéridos, promover la pérdida de peso y prevenir el estreñimiento.
Los alimentos más ricos en fibra vegetal
Manzana
Pera
Fresas
Aguacate
Plátano
Zanahoria
Rábano
Nopal
Lentejas
Espinaca
Kale
Frijoles
Chícharos
Garbanzo
Quinoa
Avena
Chocolate amargo