Así es la forma de usar los beneficios del café para tener una piel saludable

El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo, pues de acuerdo a los datos arrojados por Qué Café, en 2019 se calculó un consumo de 162 millones de sacos. Se estima que al año, las personas consumen al menos 400 mil millones de tazas y la demanda sigue en aumento. Y es que tomar una taza de café en especial durante las mañanas es una verdadera delicia a la que muy pocos nos podemos negar, en especial en esta temporada de cuarentena en la tenemos más tiempo en casa para preparar con calma una buena taza de café recién hecho. 

Tomar café va más allá que un simple hábito de la alimentación cotidiana, ya que este podría ser la solución que tanto estabas buscando para eliminar el problema de la llamada rosácea, un padecimiento común entre la sociedad, en especial entre las mujeres de piel blanca, quienes suelen ser la más afectadas. Contrario a la creencia popular, el consumo de café no es un factor que provoque este padecimiento y por el contrario podría ayudar a controlarlo. 

¿Qué es la rosácea?

Lo primero que hay que tener en claro es a qué nos referimos cuando hablamos de rosácea, aunque seguramente ya la has visto. Según Mayo Clinic, se trata de una afección común en la piel que causa enrojecimiento y hace visibles los vasos sanguíneos que se encuentran en el rostro. Además, puede producir pequeñas protuberancias llenas de pus que en ocasiones pueden confundirse con el acné. Por lo general, estos signos pueden desaparecer y aparecer de forma aleatoria o incluso podrían confundirse con la ruborización del rostro. 

Según lo señalado por la escuela de medicina de Harvard, en los casos más severos en los que se presenta la rosácea, puede afectar el mentón, frente, nariz, orejas, así como los ojos y los párpados. A la fecha no se conoce con exactitud qué es lo que provoca este padecimiento, sin embargo, hay factores que entran en juego para su aparición, tal es el caso de diabetes tipo 1 y la esclerosis múltiple, ya que en todas parece estar involucrado el funcionamiento del sistema inmune. 

En los últimos años, se creía que la cafeína, exposición al sol, las comidas picantes y los factores hormonales incidían de forma directa en el desarrollo de la rosácea o podrían empeorarla una vez que esta fuera detectada. Sin embargo, un estudio reciente podría demostrar que la cafeína no es un factor de riesgo para el desarrollo o empeorar la rosácea, sino que podría ser una de las soluciones. 

Dicho estudio analizó los datos de salud de encuestas proporcionadas a casi 83 mil mujeres durante más de una década y los resultados fueron sorprendentes. 

De los pacientes analizados, se descubrió que aquellos que bebían cuatro o más tazas de café al día tenían significativamente menos probabilidades de informar un diagnóstico de rosácea que aquellos que bebían poco o nada de café. Mientras que, los que bebían menos de cuatro tazas de café al día también tenían menos probabilidades de tener rosácea, aunque el efecto protector fue menor.

En el caso del consumo del café descafeinado, no se encontró una relación con una menor incidencia de la aparición de la rosácea, incluso, la ingesta de la cafeína a través de otros alimentos y bebidas no tuvieron un impacto significativo en las probabilidades de llegar a desarrollar este padecimiento. Aunque se trata de hallazgos importantes, aún es necesario profundizar en el tema para comprender a fondo porque la rosácea se desarrolla en cierto tipo de personas y en otras no. 

La rosácea puede afectar a cualquier persona, sin embargo, esta afección es mucho más clara en mujeres de mediana edad de piel clara. Aunque no existe una cura efectiva para tratar esta afección, el tratamiento adecuado puede controlar y reducir los signos más evidentes de este padecimiento. Recuerda que es muy importante que acudas con un especialista en el tema para que sea quien te indique cual es el tratamiento más adecuado de acuerdo a tus necesidades específicas.