¿Quieres un platillo fácil, rápido de elaborar y delicioso para la hora de la comida? Entonces no hay nada mejor que unos buenos tacos caseros. Y si quieres un relleno que, además de rico, te lleve poco tiempo preparar, entonces el alambre de pollo puede ser la opción perfecta para ti: un platillo muy popular por su sabor y versatilidad, y que puedes adaptar a tus gustos agregando tus ingredientes favoritos.
El alambre se caracteriza por tener una mezcla de carne, vegetales y delicioso queso derretido por encima, lo que lo convierte en un guisado irresistible para hacerte unos buenos tacos en segundos. Este platillo tiene todo lo que necesitas en tu taco en una sola cucharada, así que solo tienes que agregar un poco de tu salsa favorita para disfrutar un buen momento en familia.
Existen muchas versiones con carne de res o cerdo, pero el alambre de pollo es una alternativa más ligera, fácil y rápida de preparar en casa, ya que este tipo de carne necesita muy poco tiempo al fuego para estar lista. Además, solo necesitas muy pocos ingredientes para tenerla lista. Súmale una buena salsa, tortillas calientes de harina o de maíz, y tendrás el plato perfecto para disfrutar al máximo unos buenos tacos.
Alambre de pollo
Ingredientes:
- 400 gramos de pechuga de pollo
- 2 cebollas
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 1 pimiento amarillo
- 150 gramos de tocino
- 250 gramos de queso Oaxaca
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite vegetal
Pasos:
- Corta la pechuga de pollo, la cebolla y el tocino en cubos medianos.
- Por otro lado, pica los pimientos en tiras y deshebra el queso Oaxaca.
- En un sartén a fuego medio, agrega el tocino y deja que suelte su grasa.
- Después, incorpora la cebolla y los pimientos. Cocina hasta suavizar.
- Por último, agrega la pechuga de pollo, sazona al gusto y cocina hasta que esté ligeramente dorada.
- Cuando la base del alambre esté bien cocida, incorpora el queso y repártelo por encima. Baja el fuego.
- Tapa tu preparación y deja que el queso se derrita por unos minutos.
- Sirve y arma tus tacos al gusto.
Puedes ahorrar tiempo pidiéndole a tu pollero de confianza que corte la pechuga en cubos, para que solo tengas que llegar a cocinarla. Recuerda que estos no deben ser demasiado gruesos o grandes para que puedan cocinarse fácilmente y en poco tiempo. Procura que el exterior esté dorado y el interior bien cocido antes de colocar el queso por encima, así no tendrás que sobrecoser tu alambre.
El alambre de pollo es bastante versátil, tanto en la preparación como una vez listo, ya que puedes sustituir muchos ingredientes por tus favoritos y agregar otros elementos para modificar la receta a tu gusto. Por ejemplo, puedes sustituir el tocino por jamón o cambiar el queso Oaxaca por otra variedad que se derrita fácilmente. Del mismo modo, al servirlo puedes utilizar tanto tortillas de harina como tortillas de maíz, según lo que prefieras.
