El 30 de abril, muchas familias en México celebran el Día del Niño con juegos, dulces y, por supuesto, comida rica que les saque una sonrisa a los peques. Si quieres sorprender a los niños con algo original y divertido, las banderillas coreanas son una excelente opción. No solo están de moda, también son súper fáciles de preparar en casa.
Las banderillas coreanas se han vuelto virales por su presentación y ese toque crujiente que las hace irresistibles. Aunque se parecen a un hot dog americano, las banderillas coreanas llevan una masa con levadura que las hace más esponjosas, y se pueden empanizar con panko o trocitos de papa para darles un crunch extra que los vuelve más delicioso
Son perfectas como snack, merienda o incluso como comida ligera. Se pueden hacer con salchicha, queso o ambos, y personalizarlas con los toppings que más gusten te gusten. Aquí te contamos cómo prepararlas en mini versión para que sean aún más divertidas este Día del Niño. ¡Manos a la obra!
Mini banderillas coreanas | RECETA
Para la masa:
- 1 taza de harina de trigo
- 1 huevo
- ½ taza de leche tibia
- 1 cda de azúcar
- 1 pizca de sal
- 1 cdita de levadura seca
Para el relleno y empanizado:
- Salchichas cortadas por la mitad
- Queso tipo mozzarella en cubos
- Palitos de madera
- Panko o papas en cubitos fritos
- Harina extra para empanizar
- Aceite para freír
Procedimiento:
- Mezcla la leche tibia con la levadura y el azúcar. Deja reposar por 10 minutos hasta que burbujee.
- Agrega la harina, el huevo y la sal, y mezcla hasta formar una masa suave. Cubre con un trapo y deja reposar 1 hora hasta que duplique su tamaño.
- Ensarta media salchicha y un cubo de queso en cada palito.
- Divide la masa en porciones pequeñas, aplástalas y envuelve el relleno. Pasa cada banderilla por harina, luego por los cubitos de papa o panko.
- Calienta el aceite y fríe las banderillas hasta que estén doradas.
- Retira el exceso de grasa con papel absorbente. Espolvorea un poco de azúcar si quieres un toque dulce y acompaña con tus salsas favoritas.
En Corea, suelen servirse con azúcar espolvoreada por fuera y salsas como kétchup, mostaza o mayonesa picante. En su versión mini, son perfectas para fiestas o reuniones, ya que se comen fácilmente con una mano y son ideales para festejar a los más chiquitos de la casa.
