El pozole rojo es uno de esos platillos tradicionales de la gastronomía mexicana que viene bien en cualquier época del año. Su elaboración suele requerir varias horas de cocción para que la carne y el maíz alcancen la textura perfecta. No obstante, con la ayuda de una olla exprés, es posible reducir significativamente este tiempo sin sacrificar el sabor o la calidad del platillo.
El truco para preparar un pozole perfecto en olla exprés es cortar la carne y los huesos en trozos pequeños, lo que permite que este ingrediente se cocine de manera uniforme y en menos tiempo. Además, al cocinar primero el maíz con elementos como la cebolla y la sal antes de agregar la carne, logramos suavizar los granos adecuadamente para que estos absorban mejor los sabores del caldo y la salsa del pozole.
Para usar la olla exprés correctamente, es fundamental contar el tiempo de cocción a partir del momento en el que la válvula comienza a emitir vapor de forma sonora. Una vez que haya transcurrido el tiempo necesario, se debe apagar el fuego y esperar a que el vapor salga por completo para poder abrir la olla de forma segura. Nunca intentes abrir la olla antes de tiempo o enfriarla rápidamente bajo el chorro de agua, ya que la presión interna podría descompensarse y causar un accidente.

Pozole rojo en olla exprés
- 500 gramos de maíz pozolero precocido
- 750 gramos de carne de cerdo (cabeza y maciza)
- 1/2 cebolla para el caldo
- Sal al gusto
- 2 chiles guajillo
- 2 chiles anchos
- 1/2 cebolla para la salsa
- 2 dientes de ajo
- 1/2 cucharadita de comino
- 1 cucharadita de orégano seco
- 1 pizca de pimienta negra
- Aceite vegetal
Pasos:
- Coloca el maíz en la olla exprés con la cebolla y la sal, y cocina por 5 minutos.
- Abre la olla de forma segura y agrega la carne; después, cocina todo de 15 a 20 minutos.
- En un sartén con un poco de aceite, fríe la cebolla para la salsa y los ajos hasta dorar ligeramente.
- Retira estos elementos y agrega los chiles para sofreír por unos segundos.
- Hidrata los chiles en agua caliente hasta que se suavicen y después llévalos a la licuadora.
- Agrega también la cebolla, los ajos, el comino, el orégano, la pimienta y un poco del agua de los chiles.
- Procesa hasta obtener una salsa uniforme.
- Cuando la carne esté lista y puedas abrir la olla de forma segura, cuela la salsa sobre el caldo.
- Rectifica la sazón y cocina por 10 minutos más para integrar los sabores.
- Sirve con tus ingredientes favoritos y disfruta.
Toma en cuenta que muchos de los procesos para realizar el pozole deberán estar listos antes de que empieces a cocinarlo para facilitar la preparación. Por ejemplo, la carne ya debe estar limpia y libre de impurezas, además de estar cortada al tamaño correcto. En el caso del grano de pozole, deberás limpiarlo para eliminar los molestos "ojitos" que se forman en su base.
Al servir el pozole, puedes acompañarlo con los ingredientes tradicionales como lechuga fresca, cebolla picada, rábano en rodajas y un toque de limón. Incluso puedes añadir un poco de orégano, chile en polvo o salsa picante para potenciar los sabores de este platillo. Aquí el gusto personal es el límite, así que puedes jugar con los sabores de tu pozole para lograr un platillo a tu medida.