El pan de muerto es el dulce más representativo del Día de Muertos en México. Su aroma a azahar y su textura esponjosa hacen que cada bocado evoque recuerdos, tradiciones y familia. Pero si no tienes horno o prefieres una versión más práctica, hoy te traemos una alternativa deliciosa: pan de muerto sin horno, hecho con pan de vainilla o mantecadas . Sí, como lo lees: no necesitas hornear ni ser panadero experto para disfrutar de esta delicia.
Este postre conserva el sabor clásico gracias a la esencia de azahar (o de naranja, si no la consigues), y su textura cremosa proviene del queso crema que ayuda a darle forma y suavidad. Es ideal para quienes buscan algo fácil y rápido, pero sin renunciar al sabor tradicional de la temporada.
Lo mejor es que puedes hacerlo en minutos y servirlo con una buena taza de chocolate caliente o café de olla. Si estás planeando una reunión familiar o simplemente quieres consentirte este 1 y 2 de noviembre, anímate a preparar este pan de muerto exprés. No necesitas horno, solo ganas de probar algo diferente y muy rico.
Cómo hacer pan de muerto sin horno
Ingredientes:
- 300 gramos de pan de vainilla (puede ser panqué o mantecadas)
- 70 gramos de queso crema
- 1 cucharada de azúcar glass
- 3 gotas de esencia de azahar (o sustituye por esencia de naranja o vainilla)
- Azúcar para espolvorear
Preparación paso a paso
- En un recipiente grande, desmorona por completo el pan de vainillina hasta obtener una textura arenosa.
- Agrega el queso crema y mezcla bien con las manos limpias o con una espátula hasta formar una masa suave y manejable.
- Añade la azúcar glass y las gotas de esencia de azahar, y continúa mezclando hasta integrar por completo.
- Divide la masa y forma pequeñas bolitas (del tamaño de un pan individual).
- Con un poco de masa, haz las tiras que simulan los “huesitos” del pan de muerto y colócalas encima de cada bolita.
- Una vez listas, pasa los panes por azúcar granulada para darles ese toque dulce y tradicional.
- Llévalos al refrigerador durante 30 minutos para que adquieran firmeza antes de servir.