Comida mexicana
Día de la torta ahogada: Conoce la historia detrás de este popular platillo y cómo prepararla
Si deseas celebrar el Día de la Torta Ahogada en casa, aquí te dejamos una receta sencilla para que prepares este delicioso platillo¿Conoces la torta ahogada? Cada 10 de septiembre, los tapatíos celebran el Día de la Torta Ahogada. Aunque esta fecha no es oficial, la tradición es innegable. La torta ahogada es un platillo emblemático de la gastronomía de Guadalajara, un platillo que combina historia, cultura y sabor. A más de 100 años de su creación, sigue siendo uno de los manjares más queridos de la región. Aquí te contamos su historia y cómo puedes prepararla para celebrar su día como se debe.
La historia detrás de la torta ahogada
La torta ahogada tiene sus orígenes en Guadalajara, Jalisco, y aunque su exacta fecha de invención no está clara, se estima que tiene más de 100 años. El inventor de este platillo fue Luis de la Torre, mejor conocido como "El Güero". Se dice que fue él quien comenzó a vender tortas ahogadas en las cercanías del Jardín de San Francisco, cerca de la antigua Terminal de Trenes de Guadalajara.
El birote es fundamental en la receta, y cuenta con una textura crujiente por fuera y suave por dentro. La historia cuenta que, accidentalmente, Luis dejó caer una torta en una salsa de chile de árbol, y en lugar de desecharla, la probó y descubrió un nuevo sabor explosivo. Así nació la torta ahogada, que hoy en día es símbolo de identidad para los tapatíos.
Este platillo es una muestra del mestizaje culinario. El birote refleja la influencia de la panadería europea que llegó con la colonización, mientras que la salsa de chile de árbol proviene de ingredientes típicos de Jalisco, como el chile Yahualica, que actualmente cuenta con denominación de origen.
¿Cómo preparar una auténtica torta ahogada?
Ingredientes:
- 4 birotes salados (o bolillos si no encuentras birote)
- 500 gramos de carnitas de cerdo
- 2 jitomates medianos
- 4 chiles de árbol secos (ajusta según tu tolerancia al picante)
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharadita de comino
- ½ cucharadita de orégano seco
- Sal al gusto
- Cebolla morada encurtida
- Limones
- Rábanos en rodajas
- Aceite para freír
Preparación:
- Si aun no tienes las carnitas de cerdo fritas, lo primero que debes hacer es: Cocinar un lomo de cerdo en trozos pequeños. Fríe la carne en aceite hasta que quede dorada y crujiente por fuera, pero suave por dentro. Una vez cocidas, reserva.
- Asa los jitomates y los dientes de ajo en un comal hasta que se pongan suaves y tengan un ligero tono quemado. Luego, colócalos en una licuadora junto con un poco de agua y licua hasta obtener una salsa suave. Agrega sal al gusto y una pizca de comino y orégano. Esta será la salsa base, ideal para quienes prefieren una versión menos picante.
- En la misma licuadora, coloca los chiles de árbol secos, previamente remojados en agua caliente durante 15 minutos, y licúalos con una pequeña cantidad de la salsa de jitomate. Esta mezcla creará una salsa potente y picante que caracterizará la torta ahogada.
- Abre los birotes por la mitad y rellénalos con las carnitas de cerdo. Colócalos en un plato hondo o un recipiente resistente a la salsa.
- Vierte la salsa de jitomate sobre la torta hasta cubrirla por completo. Si prefieres más picante, añade un poco de la salsa de chile de árbol. Deja que el pan absorba parte de la salsa durante unos minutos.
- Decora tu torta ahogada con cebolla encurtida y rodajas de rábanos. Sirve con rodajas de limón para exprimir al gusto.