Pan dulce: Receta para preparar un rico y esponjoso cuernito para tu desayuno

Cuernitos, medialunas, cangrejos y, el más famoso, croissant son algunos de los nombres bajos los que podemos encontrar a esta pieza de pan, al cual, hoy en día encontramos que puede ser dulce o salado dependiendo del gusto de la persona que lo coma; asimismo, puede ir relleno de ingredientes como queso, chocolate, cajeta o algún tipo de mermelada para que sacien el antojo.

Si bien, esta pieza de hojaldre es muy famosa por ser adoptada por la cocina francesa, tiene su origen en Austria; de hecho, simbólicamente su forma de medialuna (presente en la bandera de Turquía) y su nombre representa la frase “comerte a un turco”, ya que fueron los panaderos quienes dieron la alarma sobre una posible invasión turca en medio de la noche y fueron condecorados por su patriótica acción.

Así como gestar un contraataque contra un invasor enemigo requiere de paciencia, también hacer pan. Por lo que si quieres acompañar tu desayuno con un rico y esponjoso cuernito, te recomendamos preparar esta receta una noche antes, ya que el secreto es dejar reposar la masa constantemente para que el aire se introduzca y tenga una consistencia más suave; sin embargo, te aseguro que valdrá completamente la pena hacer estos croissants.

Receta para un cuernito

Ingredientes:

• 250 gramos de harina de panadería
• 75 gramos de levadura fresca
• 125 ml de agua tibia
• 750 gramos de harina
• 50 gramos de azúcar
• 450 gramos de mantequilla
• 30 gramos de sal
• Agua

Paso a paso:

1. Lo primero es preparar la levadura. Para ello, en un recipiente de vidrio vacía los primeros 250 gramos de harina, la levadura fresca y los 125 mililitros de agua tibia. Mezcla muy bien los ingredientes hasta formar una masa similar a una esponja. Tapa con una servilleta y deja reposar en un lugar cálido.

2. Sobre una mesa de trabajo, vacía los 750 gramos de harina y forma un volcán en el centro donde vaciarás 50 gramos de mantequilla, el azúcar, la sal y, poco a poco ve incorporando la cantidad de agua necesaria para formar una masa blanda. Amasa todos los ingredientes durante 10 minutos, hasta adquirir cierta elasticidad.

3. Enseguida, añade la levadura preparada y continúa amasando durante 10 minutos hasta obtener una masa lisa homogénea. Nuevamente, vacía en un recipiente de vidrio, tapa con una servilleta y deja reposar durante unos 10 minutos.

4. Los 400 gramos de mantequilla restante vacíalos sobre un papel de hornear y tápalo con otro trozo de papel de hornear. Aplasta y estira la mantequilla con ayuda de un rodillo para que te quede una lámina alargada. Reserva aparte.

5. Sobre la mesa de trabajo espolvorea harina y vacía encima la masa. Comienza a estirar y coloca sobre ella la lámina de mantequilla. Dobla los extremos de la masa hacia el centro como si se tratara de un sobre y vuelve a estirar. Repite este paso hasta obtener una masa tipo hojaldre. Deja reposar.

6. Estira la masa con ayuda de un rodillo de modo que mida alrededor de 40 centímetros de ancho, sin importar el largo. Divide la masa en dos mitades y, después corta triángulos que tengan 8 centímetros aproximadamente de base.

7. Enrolla los triángulos desde la base hasta la punta y colócalos en una bandeja previamente engrasada con la punta hacia abajo y dales forma de media luna. Nuevamente, tapa y reserva hasta que doblen su tamaño.

8. Finalmente, antes de meterlos al horno, pinta la superficie con huevo y hornéalos a 225 °C durante 15 minutos.

9. Cuando estén listos, sácalos del horno, déjalos enfriar y sirve.

Dependiendo del sabor que busques, antes de que se enfríen puedes volver a pintarlos pero, esta vez con almíbar. También si quieres rellenarlos con algún ingrediente dulce y salado, una vez que tengas los triángulos cortados, lo puedes agregar al centro para después enrollar con cuidado para que no se desparrame por todo el pan. Y, ¡listo! Así de fácil tendrás un delicioso cuernito listo para tu desayuno.