Cocina fría
¿Te quedaste sin gas? 2 platillos que puedes preparar fácilmente sin usar la estufa
Estas recetas no requieren de tu estufa para quedar perfectas, están llenas de sabor y son muy sencillas.
Quedarse sin gas mientras haces la comida generalmente es una mala experiencia, ya que no puedes terminar tus platillos o incluso iniciarlos, sin embargo, no es el fin del mundo e incluso hay muchas recetas frías que puedes preparar en casa sin utilizar ni siquiera tu estufa, por eso tenemos dos recetas especiales qué puedes preparar de forma sencilla y rápida en tu hogar.
Sandwichon
Ingredientes
- Pan blanco
- 350 gramos de Jamón
- Queso amarillo en rebanadas
- 200 gramos de Queso Crema
- 3 cucharadas de Mayonesa
- 200 gramos de Crema ácida
- 1 cucharada de Ralladura de limón
- Sal y Pimienta
El sandwichón es un clásico de fiestas y de la comida fría, prepararlo solamente requiere de tu licuadora y para ello tendrás que procesar el queso, la mayonesa, la ralladura de limón, la crema, un toque de sal y pimienta, hasta lograr una pasta de consistencia cremosa, reserva y comienza a armar tu sandwichón.
Retira todas las orillas de los panes y acomódalos formado un cuadrado grande, coloca una capa de jamón, una capa de queso y después una capa de la crema que acabas de preparar, repite esto por cuatro capas más y después cubre todo con el resto de la crema hasta formar una especie de pastel, por último decora con verduras frescas como jitomate, pepino o limón.
Ceviche
Ingredientes
- 400 gramos de Filete de pescado blanco
- 8 Limones
- 1 Pepino
- 2 Jitomates
- 1 Cebolla
- 2 Chiles serranos
- Sal y Pimienta
El ceviche es uno de esos platillos que para tenerlos listos solamente tienes que cortar todo y dejar reposar, para prepararlo corta tu pescado en cubos pequeños, rebana tu pepino y cebolla, pica en cubos el chile y el jitomate, y por último exprime los limones para extraer su jugo, mezcla todos los ingredientes excepto el jugo de limón, sazona muy bien tu preparación con sal y pimienta, después añade tu jugo de limón 20 minutos antes de servirlo, recuerda que la frescura de tus ingredientes es vital para que el platillo salga perfecto.
