Prepara un capeado perfecto y crujiente para tus recetas de Cuaresma con esta receta

La Cuaresma ya está aquí y no hay nada mejor que saberla vivir y aprovechar las oportunidades que se nos brindan para prepararnos platillos diferentes, que nada tienen que ver con la carne roja o las aves. Más bien con el mar, el hogar de miles de misterios y seres que también son deliciosos y que podemos comer al menos de vez en cuándo. De hecho es mucho más saludable a comparación de todas las toxinas que nos comemos con la carne roja. 

Durante el tiempo litúrgico de Cuaresma, se tiene prohibido comer carne roja, porque simboliza un lujo o comida de celebración, que se estilaba antes, al menos durante el tiempo de Jesucristo y aún miles de años después se decidió seguir respetando este rito al conmemorar el último periodo de vida de Jesús en la Tierra un poco antes de Semana Santa. Los más estrictos no comen ni carne de aves, mientras que los más laxos, se dan un pecadillo de vez en cuándo. 

Comer pescado es un descanso para nuestro sistema digestivo y hay muchas maneras para poder hacerlo. Se puede preparar a la plancha, empapelado, a la parrilla, frito y sobre todo: Capeado. Seguro lo hemos probado así más de una vez. Nos encanta y no lo podemos negar. Por esa razón no es ningún secreto que busquemos hasta el cansancio muchas y nuevas recetas para cocinar esta deliciosa carne. 

¿Qué beneficios tiene comer pescado?

Hoy compartiremos contigo cómo es que puedes preparar un rico y crujiente capeado para tus filetitos o camarones, que forman parte de esa botana, antojito o receta con los que pretendes pasar la temporada de Cuaresma. Ésos tacos gobernador o ensenada, esos simples filetes fritos o lo que se te ocurra. A diferencia de otros capeados simples, este es un poco más especiado y realza el sabor del pescado. 

El pescado es una carne sumamente nutritiva, que nos puede aportar desde minerales como fósforo, potasio, calcio, sodio, magnesio, hierro, yodo y cloro hasta ácidos grasos como el Omega 3 y Omega 6, que benefician hasta nuestro desempeño cognitivo, mejorando la atención, concentración y memoria. También contienen vitaminas del grupo B (B1, B2, B3 y B12), la A, D y en menor proporción la E. El aceite de hígado de pescado constituye la fuente natural más concentrada de vitamina A y de vitamina D.

Gracias a esta receta, puede que incremente tu gusto por comer pescado y eso es bueno, porque cuando menos te des cuenta, tu cuerpo digerirá mejor, serás menos propenso a cualquier enfermedad cardiovascular, tu retención, concentración y atención serán mejor y además, podrás combinarlo con tu lechuga o verduras favoritas, porque es una carne que se presta. Además sabe bien rico con toda clase de salsitas. Ya te enamoramos lo suficiente, ¡manos a la obra!

Ingredientes

• 1 taza de harina de trigo de todo uso 
• 1 taza de cerveza  a temperatura ambiente
• ¼ de cucharadita de polvo para hornear
•  ½ cucharadita de pimienta negra molida
•  ¼ de cucharadita de ajo en polvo
• 1/8 de cucharadita de orégano seco (1 pizca)
• ½ cucharadita de sal
• 1 cucharada de mostaza

¿Cómo se prepara?

1. En un tazón, coloca harina de trigo y todos los ingredientes secos.
2. Agrega una taza de cerveza y empieza a mezclar. Después, ve agregando poco a poco el resto de la cerveza y sigue mezclando. 
3. La mezcla debe de ser de una consistencia parecida a la de los hot cakes. 
4. ¡Listo, ya puedes capear y freír! Tardan como 2 minutos por lado en estar listos. 
5. ¡Provecho!