Acompaña tu desayuno con unos ricos frijoles refritos, te decimos cómo hacerlos

El desayuno es la comida más importante del día, porque es nuestra primera comida después de un largo periodo de ayuno, como es el sueño, el momento que nuestro cuerpo ocupa para depurarnos y dejarnos como nuevos. Nosotros no nos damos cuenta, porque aparentemente estamos en calma y reposando, pero en nuestro interior, mientras sueñas con tu crush, con tu perrito o que corres por el universo están ocurriendo un montón de procesos.

Por eso, es muy importante no omitirlo, pues tenemos que reemplazar todos esos nutrientes que ya se desgastaron en las pasadas 6 u 8 horas, porque encima de todo, tenemos que empezar un nuevo día llenos de energía, inteligencia y salud, porque de todo eso depende nuestro desempeño escolar y laboral. Por eso, lo más importante es que elijamos muy bien nuestros alimentos para que nos nutran en serio.

Desayunos hay muchos, pero de acuerdo con los expertos, los más saludables y nuestra mejor opción, deben de contener carbohidratos, que podemos encontrar en galletas, cereales o harinas en general; proteínas que se alojan en los productos lácteos, carnes magras, algunas semillas y huevo; vitaminas más minerales, que se alojan regularmente en frutas, verduras y algunos cereales. 

¿Cómo se preparan los frijoles refritos?

Puede que ya tengamos claro qué es lo que podemos comer, pero lo que es un hecho es que casi siempre andamos a las carreras agarrando lo primero que encontramos y muchas veces dejamos incompleta nuestra ración de nutrientes y ahí querida amiga es donde las guarniciones vienen a reforzar nuestra comida, pues son justo eso que le hacía falta a lo que elegimos. Aunque hay gran cantidad de guarniciones, nosotros hoy te enseñaremos a preparar unos ricos y prácticos frijoles refritos. 

Los frijoles son un alimento típico de México y muchos los consumimos con más regularidad de la que nos gustaría aceptar. ¿Quién no recuerda la olla de frijoles que tenía la abuelita en su cocina casi de ley? La verdad es que son la clave, para que aún en los hogares más humildes no exista la anemia, pues es un alimento sumamente rico en hierro, vitaminas del grupo B, ácido fólico, calcio, potasio, fósforo y zinc. 

Y para que completes tu desayuno, hoy te enseñaremos cómo prepararlos en caso de que no hayas aprendido nada de la abuela y tu mamá, porque estabas acostumbrada a que todo te llegara a tu lugar sin que movieras un dedo. Pero esos días de privilegio se terminaron. Sobre todo, porque ahora que eres un adulto independiente, pues tienes que hacer todo tú y ¿qué mejor que empezar con el básico de básicos?

Ingredientes

• Suficientes frijoles enteros o de la olla
• Un poquito de aceite o manteca
• Sal al gusto

¿Cómo se preparan?

1. En una sartén coloca la manteca o el aceite y luego que esté caliente, deja caer los frijoles. Entre más caldito tengan, quedarán más aguaditos, si los quieres secos o para tacos, procura que estén lo más secos posible. 
2. Con un machacador de papa o frijoles, machácalos hasta que formen una especie de pasta homogénea.
3. Agrega un poquito de sal. 
4. ¡Listo! 

TIP: Puedes usar un poquito de cebolla o chile, si lo deseas a la hora de sofreír para darles un poco más de saborcito, en caso de que te gusten un poco más picositos.