¡No compres más! Mejor aprende a preparar una salsa macha de cacahuate casera; aquí la receta

Todos hemos probado alguna vez en nuestras vidas esa salsita llena de pepitas, cacahuates y sabrá dios cuántas semillas más, que además, combinadas con aceite y chile, le dan a nuestro paladar un tremendo agasajo, que siempre nos deja con ganas de más y francamente le va a casi todo. Estamos hablando de nada más y nada menos que de la salsa macha. Sí, esa que es difícil de describir, pero fácil de disfrutar. 

Tiene famosa de muy picante, pero la verdad es que esto último es variable, pues cuando tú la haces, eso lo controlas tú. Es de origen mexicano y su ingrediente principal es el chile de árbol, una variedad local, cuyo picor es variable. Sí, es ése chile que se usa para hacer los chilaquiles, que a veces pica y otras no, o muy poquito. Sin embargo, también se puede sustituir por otros chiles, como el morita y hasta el piquín para esta salsa.

Algunas recetas le ponen ajonjolí o sésamo, pero no siempre es así. Se cree que es de Veracruz, pero en realidad no se sabe de dónde es. Sin embargo, en este estado se suelen usar chipotles secos e incluyen cacahuates, pero en Orizaba, por ejemplo, a menudo se usa chile serrano seco, mientras que otras recetas veracruzanas incluyen chile serrano y morita fritos. Esto quiere decir que queda bien básicamente con cualquier chile, siempre que se sepa utilizar. 

¿Por qué se llama salsa macha?

Su nombre proviene de la palabra macho la cual además de las concepciones machistas, puede significar adjetivos como "duro" "bravo" o "agresivo", pues el término es un coloquialismo despectivo, que mucho tiempo se usó para referirse a hombres de carácter muy fuerte o violento, por lo que de ello derivaron expresiones como "Pica/ pega/pesa bien machín", que se usa para decir que algo nos hace sufrir mucho. Por eso, el nombre de la salsa apela a la "bravura" como metáfora de lo picante. 

Salsa macha es un nombre que evoca a lo picante que puede llegar a ser y que podría hacer llorar a cualquier valiente de valientes tan pronto la pongan en su taco, por eso, cuando alguien dice que le gusta, muchos le aplauden o intuyen que su paladar está acostumbrado casi a todo. Y si antas agüitada, hoy es el día en que eso se te quitará con la receta de este aderezo, que seguramente hará que te olvides de todo. 

Desde los fogones ancestrales, la receta ha traspasado cualquier tipo de frontera y hoy la tienes frente a tu pantalla favorita para que comiences a prepararla muy a tu estilo y sin miedo al éxito, mami. La verdad es que como te adelantamos, esta preparación merece mucho la pena, porque puedes ponérsela desde a tus naranjas, como a tu sopa, caldo o cualquier carne. Leíste bien CUAL-QUIE-RA, porque combina con todo y lo hace más apetecible. Así que ¡manos a la obra! 

Ingredientes

• Cacahuate al gusto (Cantidad sugerida: 100 grs.)
• Ajonjolí al gusto (Cantidad sugerida: 100 grs.)
• 100 grs de pepitas
• 30 ml de aceite de oliva
• Chile de árbol seco al gusto
• Ajos al gusto (Cantidad sugerida: 3 dientes de ajo)
• Sal al gusto

¿Cómo se prepara?

1. Vierte un poco de aceite de oliva en un sartén y echa 2 puños de árbol seco  y los dientes de ajo pelados y finamente picados.
2. Fríe los primeros ingredientes unos 2 minutos sin que se tuesten. 
3. Espera que se enfríen y pon los chiles y ajo en la licuadora. Ve agregando el aceite de oliva poco a poco hasta cubrir el chile con el aceite. 
4. Tuesta el cacahuate y ajonjolí y una vez tostado, a la licuadora. Agrega un poco de sal y tritura todo. 
5. Envasa y ¡listo!