Gastronomía

Receta para hacer una pizza de cuatro quesos en casa

Esta especialidad italiana es muy versátil. Se puede elaborar con diversos ingredientes, como esta rica preparación que aquí te compartimos
sábado, 4 de septiembre de 2021 · 16:00

La pizza se ha convertido en un plato de talla mundial, que lo mismo se disfruta en su país de origen, Italia, como en los lugares más recónditos del planeta. Por ello, la variedad de ingredientes con los que se pueden confeccionar es enorme. Aunque, uno de los productos que nunca falta en la pizza es el queso.

Y, si el ingrediente lácteo es fundamental ¿por qué no agregar cuatro tipos de queso? De verdad, esta preparación es digna de los paladares más exigentes.

El origen de la pizza se remonta  siglos atrás. Una especialidad que, definitivamente, vino a enriquecer la gastronomía mundial.

“Se tiene documentada la existencia de panes circulares que, en los tiempos de Darío I, el Grande, eran acompañados con hierbas, especias y cebollas, además de queso fundido. Sin embargo, la pizza propiamente dicha, tal como la conocemos, es posible que haya sido creada en la ciudad de Nápoles, Italia, por ahí del siglo XVII; justo cuando Europa conoció los primeros jitomates, provenientes del Nuevo Mundo”, se menciona en los registros.

A continuación, te compartimos la receta de la pizza a los cuatro quesos. Te aseguramos que te va a encantar.

 

Pizza a los cuatro quesos

Ingredientes

Ingredientes masa para pizza

  • 200 gramos de salsa de jitomate 
  • 100 gramos de queso mozzarella rallado
  • 100 gramos de queso de cabra con ceniza, desmoronado
  • 50 gramos de queso azul desmoronado
  • 50 gramos de quesillo

 

Procedimiento

Precalentar el horno a 180 °C. Formar una esfera con la masa y extenderla sobre una superficie enharinada hasta obtener un círculo de 30 centímetros de diámetro, colocar sobre una charola para pizza. Extender sobre la masa la salsa de jitomate y distribuir el queso mozzarella, el queso de cabra, el queso azul y el quesillo. Hornear la pizza de 15 a 20 minutos o hasta que la superficie esté dorada y crujiente. Sacar del horno y servir de inmediato.