¿Quieres salir de la rutina? Así puedes preparar unas ricas espinacas a la crema con huevo

Después de quedar inconsciente, probablemente comer por comer o por no morir, puede que sea una de las peores cosas que le pueden pasar a un ser humano, porque no degusta su comida en tiempo y forma. Comer sin saborear, ya sea porque no estás de ánimo o porque es una comida que has probado tantas veces, que ya no la disfrutas es un sentimiento que no se le desea a nadie, porque estás hablando de que todo se volvió una completa monotonía. 

Y si hay algo que mate a la pasión, al amor y al gusto por algo, eso sin duda alguna es la rutina. Es enemiga de todo tipo de relaciones y amida del régimen de ejercicio, pero la verdad es que hasta eso cansa cuando no sales de lo mismo, porque te condenas cual autómata a seguir con lo mismo hasta el día en que tu corazón deje de latir  y eso es muy feo, porque te limitas y no exploras otras cosas. 

La verdad es que la comida es tan variada casi como los países y sus regiones alrededor del mundo, porque cada lugar tiene sus propios condimentos, que seguramente sorprenden a más de uno cuando se atreven a abrir y ampliar sus horizontes gastronómicos, pues si te lo propusieras, siempre podrías probar algo nuevo, porque opciones, siempre hay, lo que pasa es que la mayoría de las veces nos resulta muy cómodo acostumbrarnos a lo de siempre. 

¿Qué ventajas tiene consumir espinacas?

Pero si ya rompiste la veracidad de que la costumbre sea más fuerte que el amor, lo cierto es que debes de empezar por probar el sabroso platillo que hoy vamos a enseñarte a preparar, porque es una combinación fabulosa y nutritiva. Se trata de unas exquisitas espinacas a la crema con huevo. Seguro no se te había ocurrido, pero después de que leas esto, es probable que se te antojen. 

Las espinacas son un vegetal que tiene un montón de beneficios. Algunos incluso dicen que es un superalimento, pues está cargada de nutrientes y es baja en calorías. Poseen gran cantidad de hierro, que en la dieta puede afectar la eficiencia con la que el cuerpo usa energía. Además gracias a su contenido de potasio, también puede ayudar a reducir la presión arterial, mientras que su fibra y agua ayudan a prevenir el estreñimiento y promueven la salud del tracto digestivo. 

Aparentemente, no se ven muy apetitosas, pero la crema y el huevo le dan completamente un toque nuevo, que estamos seguros te encantará probar. Además un platito con esto, podría proveerte la cantidad de vitaminas y proteínas que necesitas en un día. Así que lejos de disgusto por probar el plato, en realidad te debería de hacer sentir genial. ¿Estás lista?

Ingredientes

• 196 ml de leche evaporada
• 600 g de espinacas frescas y limpias
• 200 g de cebolla
• 1 diente de ajo
• 25 g de harina
• Sal al gusto
• Pimienta negra molida
• 80 ml o 4 cdtas de aceite de oliva
• 4 huevos
• 100 g de queso rallado para gratinar

¿Cómo se prepara?

1. Pela y pica el ajo. Pela la cebolla y córtala en brunoise.
2. En una cazuela grande añade 3 cucharadas de aceite y añadimos la cebolla y el ajo.
3. Deja unos 5 minutos a fuego suave, removiendo de vez en cuando, hasta que la cebolla esté transparente.
4. Añade la harina y deja cocinar unos 2 minutos., también removiendo.
5. Incorpora las espinacas y vamos mezclando continuamente hasta que las espinacas vayan disminuyendo de tamaño.
6. Cuando hayan perdido su volumen totalmente, añade la leche evaporada. Salpimenta y remueve unos 5-7 minutos, hasta que las espinacas estén tiernas. 
7. Reparte las espinacas en 4 cazuelitas aptas para el horno.
8. Haz un hueco en cada una de ellas y echa el huevo. Añade una pizca de sal en la yema.
9. Reparte el queso rallado y pon en el horno precalentado a 200º unos 12-15’ hasta que la clara esté cuajada.
10. Sirve caliente.