La receta de focaccia sin amasado definitiva, una buena opción que te encantará

La focaccia es ese pan plano entre pizza y pan, muy tradicional en la cocina tradicional italiana y que se suele come enriquecida con aceite de oliva y hierbas mediterráneas como el tomillo u otras, eso va a gustos. Se puede comer tal cual sola o para comer otros alimentos como patés por ejemplo. Pero si esto de por sí es importante, imagina que la que vas a aprender a hacer en este artículo no necesita amasado, así que ya no hay excusas para hacerla. 

Ingredientes:

• 500 g de harina panadera o de fuerza
• 415 g de agua helada
• 10 g de levadura de panadero, si es seca sobre 3 gramos
• 10 g de sal
• Cantidad suficiente de Aceite

Para el aceite enriquecido: 

• 1 manojo de perejil
• 1 diente de ajo
• Sal 
• Aceite de oliva
• Haremos un puré ligero con la ayuda de la licuadora o batidora

Elaboración:

1) Se diluye la levadura en el agua helada y se mezclan todos los ingredientes a mano o con la ayuda de una cuchara.  Quedará una masa pegajosa.

2)Plegar 3 veces la masa sobre sí misma, una cada 30 minutos. Dejar reposar toda la noche  en el frigorífico o refrigerador.

3)Al día siguiente ponemos la masa sobre una mesa bien aceitada para que no se peque y la vamos plegando sobre sí misma varias veces sobre sí misma. 

4)Dejarla fermentar 30 minutos y se vuelve a plegar.

5)Dejarla reposar 45 minutos, volver a plegarlas con cuidado para que no pierda gas.

6)Una vez que la masa haya duplicado su volumen, volcarla sobre una charola enharinada a la que previamente le hayamos puesto un papel de hornear. Dejamos reposar  media hora y  con los dedos le hacemos hendiduras con cuidado de no romper o desgasificar la masa, ponemos la mezcla de aceite e hierbas y la coceremos en el horno a 250 grados. 

Durante los primero 15 minutos pondremos en el horno una taza de agua, para que le dé humedad.

El tiempo restante (25 minutos). Pasado este tiempo el pan estará cocido.