Niño envuelto tostadito, una comida rápida y deliciosa para toda la familia

En México existen algunas preparaciones que no son únicas de nuestro país, pero su nombre suele variar, como el caso del famoso "niño envuelto", una especie de sándwich que consiste en jamón y queso envuelto en pan de caja enrollado y que regularmente se sirve frío, pero que en esta ocasión te diremos cómo hacerlo tostadito, para que el queso se derrita y vaya muy acorde con esta temporada de frío.

Aunque no hay un explicación para el nombre de este platillo, se cree que su nombre viene de la figura de un bebé envuelto en una cobija, ya que al menos en Latinoamérica es tradicional enrollar, literalmente, a un bebé en varias cobijas para que no sufra de frío. Este preparado también se disfruta en otros países del continente, como Chile, Uruguay y Argentina, aunque allá se elabora típicamente con carne de ternera.

Existen muchas variantes para esta receta, algunos usan carne molida y hay quienes le suman otros ingredientes, pero la ventaja de esta preparación consiste en que es realmente económica, alcanza muy bien para seis a ocho personas y resulta bastante atractiva para los niños. Recuerda acompañar este tipo de comidas con una ensalada fresca o con verduras cocidas para tener una alimentación balanceada. ¡Esperamos que la disfrutes!

Niño envuelto

Ingredientes:

• 1 paquete de pan de caja blanco
• 250 gramos de jamón de pavo
• 250 gramos de queso manchego en rebanadas
• 1/2 taza de mayonesa
• 1 lata de de chiles en vinagre en rajas (opcional)
• 1 lechuga mediana

Coloca una hoja de papel aluminio sobre una superficie plana y encima ve colocando los panes de caja sin las orillas, de forma que queden bien unidos, según el tamaño que quieras lograr.

Pasa un rodillo limpio por encima del pan y ve alisando las orillas para unir las rebanadas, una vez que esté bien aplanado unta mayonesa en toda la superficie.

Agrega las rebanadas de jamón de pavo y las rebanadas del queso mancheg. Si te gusta el picante agrega las rajas de chile en vinagre y comienza a enrollar, cuidando de dejar bien apretado el rollo, termina de envolver con el papel aluminio y mete al refrigerador por al menos 30 minutos.

Una vez que lo vayas a servir, retira del refrigerador, deja enfriar a temperatura, rebana tan grueso o delgado como quieras presentar las porciones y coloca en un sartén a fuego medio sin aceite, da la vuelta y una vez que esté dorado retira.

Sirve las hojas de lechuga, previamente lavadas y desinfectadas, para decorar y encima los rollitos de niño envuelto, ¡a disfrutar!