Prepara la mejor salsa macha con cacahuate para tu carne asada

Los amantes del picante seguramente han probado alguna vez la salsa macha, una preparación picante que se hace con base en chiles secos freídos en aceite, donde se incorporan diferentes tipos de chiles y condimentos que dan un sabor muy especial a este aderezo que se acompaña con una gran variedad de platillos.

La salsa macha es un complemento ideal para acompañar guisos mexicanos como los tacos, el pozole, e incluso una rica carne asada, pues el picante hace explotar los sabores del platillo. Sin embargo, no todos son amantes del picante o pueden considerar demasiado elevado el sabor de este preparado.

Al estar hecha en su mayoría con chile de árbol y tener en esta receta un chile morita, el picante es bastante elevado, por lo que debes saber que si no estás acostumbrado al picor, esta salsa puede no ser de tu agrado. Sin embargo, te decimos cómo lograr un sabor magnífico gracias a la inclusión de cacahuate en la receta, ¡no puedes dejar de intentar y probar esta delicia!

Salsa macha con cacahuate

Ingredientes:

• 50 gramos de chile de árbol
• 1 chile guajillo
• 1 chile morita
• 1/2 taza de cacahuates
• 1 taza de aceite de oliva virgen
• 3 dientes de ajo
• 10 gramos de ajonjolí
• 1/2 cucharadita de sal

Limpia los chiles guajillo y morita con un trapo limpio, quítales la colita y las semillas, reserva.

Coloca una cazuela a fuego medio alto con el aceite de oliva virgen y una vez que esté caliente agrega los dientes de ajo ya pelados, deja que se doren y en cuanto estén con ese tono sácalos y reserva.

Agrega al aceite los chiles de árbol y remueve constantemente para que se doren por todos lados, pero sin dejar que se quemen, pues la salsa se amargaría. Sácalos en cuanto estén dorados y reserva.

Enseguida añade el chile guajillo y también remueve para que se suavice y se dore, en cuanto cambie de color deberás sacarlo, sin permitir que se queme pues amargaría tu salsa. Retira y reserva. Haz lo mismo con el chile morita.

Añade el ajonjolí, remueve y en cuanto se dore pasa la mezcla a un tazón y separa las semillas con ayuda de una coladera.

Regresa la cazuela al fuego y añade un chorrito del aceite que retiraste, sirve los cacahuates naturales, remueve y en cuanto se doren retira del fuego.

Espera a que el aceite y los demás ingredientes se enfríen y pasa a la licuadora los chiles guajillo, morita y de árbol, las semillas de ajonjolí, los ajos, el aceite y la sal, muele hasta obtener una mezcla más o menos homogénea y agrega al final los cacahuates, dando una molida ligera para que queden casi completos. ¡Tu salsa macha estará lista!