Recetas

¿Qué puedo comer hoy? Prepara unas ricas costillas de res estilo Teriyaki

El Teriyaki es una técnica de cocción de la cocina japonesa en la cual los alimentos son asados en un adobo de salsa dulce
viernes, 18 de septiembre de 2020 · 11:09

Me encanta todo lo relacionado con la salsa Teriyaki. Reconozco que el uso de sabores dulces en la cocina salada puede resultar cuanto menos polémico, pero superdelicioso. Otra cosa que me parece muy rico, si están bien cocinadas son las costillas de cerdo, que resultan melosas y flagrantes con esta salsa que juega muy bien con el cerdo. 

 La palabra «Teriyaki» deriva de la palabra «teri», que se refiere al brillo que le da la salsa, y «yaki», que se refiere al método de cocinarla. En esta ocasión te enseñamos a hacer una ricas costillas de res con esta fascinante salsa.
 

Ingredientes:

Un costillar de cerdo (prefiero las baby ribs)

Glasa Teriyaki:

3/4 de taza de Mirim

3/4 de taza de sake

3/4 de taza de salsa de soja oscura

3 cucharadas de azúcar 

1 cucharada de cualquier salsa de chiles asiática

1/4 de taza de jengibre finamente picado

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Paso a paso:

Lo primero que vamos a hacer es retirar la membrana al costillar, esto lo haremos usando una servilleta de papel para que no se resvalen los dedos. Es muy sencillo de hacer.

Para hacer la glasa, en una cacerola pequeña, combinar el mirin, el sake, la salsa de chile y el jengibre. LLevar a ebullición.

Luego, reservar 1 taza para usarla como adobo. Hierva la salsa restante hasta que sólo quede una taza. Reservar para usarlo como glaseado. 

Se cubrirán las costillas de forma uniforme por todos los lados con la marinada, y se dejan reposar, como mínimo 15 minutos en el refrigerador, y si las queremos con más sabor deberán estar hasta 8 horas.

Las podremos hacer en parrilla o en horno. Te voy explicar como se hacen en el horno, comenzamos con una temperatura baja como 125 grados durante 3 horas, pasado ese tiempo, sacamos las costillas y las glaseamos, pintando las costillas nuevamente con el glaseado.

Ponemos el horno a una temperatura más elevada como 200 grados y ponemos las costillas durante una hora más, y ya estarán lista para ser consumidas. Salen muy tiernas. 

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