Comida mexicana

Receta de una comida 'chilanga', disfruta un rico caldo de gallina

El caldo de gallina es un platillo tradicional de la capital mexicana, se prepara con arroz y garbanzos y se acompaña con tortillas hechas a mano
lunes, 24 de agosto de 2020 · 17:22

En los días nublados y con frío los caldos siempre se antojan, pero el de gallina es un preparado delicioso y muy tradicional de la capital mexicana, por lo que los 'chilangos' gustamos de buscarlo en los mercados donde lo sirven regularmente con tortillas hechas a mano y una exquisita y picosa salsa hecha con chiles rojos, así que si quieres aprender esta receta aquí te damos una opción muy clásica.

La receta tradicional se hace con la gallina completa y ésta contiene lo que es conocida como "huevera", pues al ser gallina contiene unos globitos que en realidad se convertirían en huevos. Esta pieza suele ser más delicada que las demás, debido a que no contiene tanta carne y los huevitos se cuecen muy rápido, por lo que algunos recomiendan ponerla en una olla a parte, aunque cada quien varía la preparación.

El caldo de gallina no es tan típico en otros estados de la República mexicana, sino más bien es una receta propia de la zona centro del país, y se caracteriza, además de la carne con la que es preparada, por llevar arroz y garbanzos, que le da un toque distinto y aporta un sabor diferente al de un caldo de pollo, por ejemplo.

Además, se diferencia de éste último porque la carne de gallina es más dura, así que suele llevar más tiempo de cocción, la cual varía entre 3 y 4 horas, por lo que sugerimos que la prepares en una olla exprés para evitar problemas. Esperamos que disfrutes este delicioso platillo y que el tiempo no te haga dudar para intentar cocinarlo, pues al final, resulta más sencillo de lo que parece. 

Caldo de gallina

Ingredientes:

1 gallina partida

1/2 cebolla grande

1/2  cabeza de ajos

1 taza de garbanzos

150 gramos de arroz

1 ramito de hierbabuena

1 poro

Sal

Ingredientes para la salsa:

20 chiles de árbol

1 jitomate grande

1/4 de cebolla blanca

1 diente de ajo grande

Lo primero es limpiar la carne, quitando el exceso de grasa en algunas piezas o las partes que estén sucias, luego coloca las piezas que lo requieran directamente al fuego, esto para eliminar las plumitas que hayan quedado en la piel, una vez que estén bien limpias lava toda la gallina con un chorro de agua fría y reserva. En tanto, coloca la olla exprés a fuego alto con poco más de la mitad de su capacidad con agua y deja que suelte un hervor.

Cuando comience a hervir añade la cebolla, la cabeza de ajo y las piezas de la gallina, agrega también 4 cucharadas de sal, revuelve, tapa y deja por alrededor de 25 minutos. Mientras está lista la carne lava muy bien los garbanzos y el arroz y resérvalos por separado. Coloca una olla grande con 1/4 de agua a fuego alto e integra los garbanzos con 2 cucharadas de sal, deja que se cuezan para agregar después el arroz.

Limpia por fuera el poro, es decir, deshecha las hojas que ya estén feas y luego pícalo en rebanadas de un centímetro de ancho aproximadamente. Cuando los garbanzos ya estén bien cocidos notarás que están suaves y que la piel se desprende, agrega entonces el arroz limpio, el poro y el ramito de hierbabuena previamente lavado, remueve y deja que se cuezan juntos.

Revisa la gallina y cuando ya esté lista la carne pásala a la olla de los garbanzos, después cuela el caldo de la gallina y vértelo en la nueva olla, así mezclarás ambos ingredientes, remueve y deja que se cuezan juntos. Mientras el caldo está listo toma el ajo y los chiles de árbol y colócalos en un comal para tatemarlos, como todos los chiles secos se doran muy rápido, ayúdate de unas pinzas para darles la vuelta y no los dejes mucho tiempo.

A parte pon un pocillo con agua suficiente y agrega el jitomate, deja que hierva, verás que cambia de color y se pela casi solito, cuando esto suceda, pásalo a la licuadora e integra los chiles y el ajo ya tatemados y 1/4 de cebolla, agrega un poquito de sal y un poco del agua del jitomate y licúa muy bien para obtener una salsa homogénea y suave.

Cuando el caldo esté listo sirve un poco de arroz y garbanzos y una pieza de la gallina, acompaña con la salsita y tortillas hechas a mano.