Recetas

Cena saludable: Prepara este pisto manchego, tradicional de la cocina española

El pisto manchego o Alboronía podría ser perfectamente el embajador de toda una cocina
jueves, 9 de julio de 2020 · 19:01

En palabra del sabio gastrónomo español Nestor Luján: "La cocina de Castilla La Mancha es la cocina manchega". El pisto manchego o Alboronía es una fritura de diversas verduras, que cocinadas a su humor dan como resultado una confitura donde cuajar huevos, o bien acompañar unos huevos fritos, carne de diverso tipo, o sólo en una tostada de pan de pueblo consistente y generoso. Si hay una receta manchega que ha transcendido fronteras, ésta es el pisto. De origen incierto, yo me atrevería a aventurar su relación con la cocina judía. Comunidades judías sefardíes tienen este plato al que lo llaman de diversos nombres, quizás el más popular la Shakshuka, platillo muy parecido, de la misma familia, quizás la madre o hermana del pisto que hoy representa a la Comunidad Autónoma Manchega.

Ingredientes y elaboración:

100 g de jamón

200 g de cebollas

2 calabacines (en México Calabacitas)

1  berenjena (en cuyo caso usamos sólo un calabacín)

250 g de tomates maduros (en México jitomates)

2 pimientos grandes de asar

100 g de aceite de oliva

Sal y pimienta

 

En una cazuela de barro o sartén, puesta al fuego, se pone el aceite y el jamón cortado en daditos.  Cuando esté frito se le añade la cebolla cortada un poco rosca pero delgada, y los pimientos sin semillas pero cortados igual en tosco. Este es un plato campero, que perfectamente puede ser adoptado por la alta cocina, pero que no entiende de cortes de verduras afrancesados. 

Cuando la cebolla y los pimientos estén casi fritos, añadimos los calabaciones cortados a dados y la berenjena (que previamente la habremos cortado a dados con piel incluída, le ponemos sal para que suelte el agua de vegetación durante 1 hora antes de cocinarla, y la enharinamos, freímos y reservamos).

Mareamos el sofrito con las últimas verduras introducidas, y ahora es el momento de añadir el tomate, pelado, sin semillas y picado, el cual reducimos hasta que quede bien frito. Eso es todo, ya tenemos listo el plato.

Se sugiere que en este pisto se cuajen huevos encima.