La granola es uno de los complementos más deliciosos para el desayuno o algún postre, pero además aporta muchos nutrientes, fibra y energía para todo el día, gracias a las semillas que la integran. Entre algunos de sus beneficios se cuenta el control de los niveles de azúcar en la sangre, ayuda a combatir el colesterol y no aporta grasas, por lo que su consumo es recomendable por los nutriólogos.
Creada por el estadounidense James Caleb Jackson en 1863, la granola se ha convertido en un alimento dulce ideal para aportar calorías al cuerpo y por ende, energía, además de que es excelente para regular el tránsito intestinal gracias al alto contenido de fibra que aportan las semillas, pues se considera que el consumo de un tercio de una taza de granola, proporciona cuatro gramos de fibra a una persona.
La granola también refuerza el sistema inmunológico, es alta en su cantidad de aminoácidos, vitaminas, minerales y proteínas. Por si todo lo anterior fuera poco, se sabe que controla la ansiedad por comer, ya que nos hace sentirnos satisfechos por más tiempo y ayuda a pasar menos hambre por las mañanas, lo que irónicamente contribuye a reducir calorías. Puedes adquirir granola en el supermercado, pero puedes hacerla en casa con esta receta.
Ingredientes
160 gramos o cuatro tazas de avena integral
30 gramos de coco rayado deshidratado
100 gramos de almendras partidas
30 gramos de pepitas o semillas de calabaza naturales
25 gramos de linaza molida
50 gramos de nueces
50 gramos de pasas
Siete cucharadas de miel de abeja
Una pizca de sal
Una cucharadita de esencia de vainilla
Tres cucharadas de aceite de oliva
Canela en polvo al gusto
Coloca en un recipiente grande, como un bowl, la avena, la linaza, las pepitas, el coco, las almendras y la nuez, agrega una pizca de sal, el extracto de vainilla, la canela en polvo, el aceite de oliva y la miel revolviendo hasta mezclar bien los ingredientes. Después coloca en una bandeja o charola de horno papel encerado, cubriéndola por completo y extiende ahí la mezcla que hiciste. Mete la charola al horno precalentado a 180 grados Centígrados y deja que se caliente por al menos media hora; sin embargo, puedes abrir un par de veces el horno para darle vuelta a la mezcla y que se dore parejo.
Diez minutos antes de sacarla, agrega las pasas, ya que éstas no requieren mayor tiempo de cocción. Una vez que la saques del horno, deja secar la granola a temperatura ambiente y después guárdala en recipientes, de preferencia de vidrio para que conserven mejor su sabor. Esta granola podrás usarla por una semana debido a que no tiene conservadores, pero además, así aprovecharás que esté fresca.