Receta

Salsa de bechamel, receta casera y sencilla para acompañar tus platillos favoritos

La salsa bechamel se utiliza para preparar diversos guisos tradicionales en las fiestas decembrinas
miércoles, 30 de diciembre de 2020 · 19:15

La salsa bechamel se considera una "salsa madre", pues es la base de muchas salsas y se utiliza para acompañar diversos platillos, desde las croquetas de jamón serrano, hasta los canelones, las pastas, verduras y carnes, incluidos los pescados. Su origen parte de la cocina francesa e italiana y su receta se mantiene de la forma original.

Regularmente la salsa bechamel se prepara con leche y mantequilla, y se espesa con ingredientes como harina de trigo, que le da una consistencia cremosa, pero que sirve para colocarse en platillos que se quieren gratinar, aunque todo depende del uso que se le quiere dar, pues puede ser más espesa o más ligera.

Existen diversas variantes para prepararla, pero en general se puede hacer más o menos espesa, de tal forma que cuando se hace para cubrir guisados como canelones, lasañas o espinacas se utiliza una salsa bechamel más ligera, mientras que si se quieren preparar croquetas o asados se usa una más espesa, también es muy típica en la cocina de Navidad en España.

Salsa bechamel

Ingredientes:

  • 50 gramos de mantequilla
  • 50 gramos de harina de trigo
  • 600 mL de leche entera
  • Nuez moscada
  • Sal

Coloca un sartén a fuego medio bajo y agrega la mantequilla, remueve para que se funda y en cuanto empiece a derretirse agrega la harina removiendo poco a poco para formar una pasta.

Ya que estén bien integrados, sin sacar del fuego agrega la leche poco a poco removiendo, de preferencia utiliza un batidor de globo para disolver bien, verás que comienzan a formarse grumos, puedes utilizar en este caso una cuchara de palo para deshacerlos.

La fórmula para que la salsa no se haga grumosa es batir constantemente con movimientos circulares y agregar poco a poco la leche; sin embargo, si se te hizo grumos la salsa puedes pasar la mezcla a la licuadora y batir hasta obtener una mezcla homogénea, después regresarla al sartén caliente y seguir removiendo.

Una vez que termines de incorporar toda la leche, agrega una pizca de nuez moscada y sal al gusto, sigue removiendo en círculos o en ochos. Si buscas una consistencia más espesa, revuelve por más tiempo para que se evapore el líquido y comiencen a salir burbujas. Si la quieres más fina puedes agregar un poco de leche o esperar menos tiempo en el fuego.