Cena una saludable sopa de chaya estilo yucateco y llénate de sus beneficios

La chaya es una planta originaria de Mesoamérica, muy consumida al sur de México y varias regiones de Centroamérica. Su nombre proviene del maya Chay y de ahí que en la gastronomía yucateca, la sopa de chaya sea un platillo tan tradicional como gustado por su población. La chaya es una planta que crece en forma de arbusto y tiene grandes beneficios nutricionales ligados a ella.

Una forma de consumirla es a través de infusiones o tés que se usan especialmente en la medicina tradicional para disminuir la cantidad de azúcar en la sangre, por lo que se ha recomendado su consumo para los enfermos de diabetes. Entre otras de sus grandes cualidades está el que disminuye el colesterol en la sangre, por lo que resulta un alimento ideal para dietas de adelgazamiento.

En esta receta se utilizan también las pepitas o semillas de calabaza, un alimento muy saludable del cual ya te hemos contado a profundidad sus propiedades nutricionales, pero entre ellas, podemos subrayar que se trata de un alimento muy rico en fibra y ácidos grasos Omega 3, que disminuyen el colesterol y los triglicéridos en la sangre, además de contener colesterol bueno (HDL), todo lo cual se suma en la pérdida de peso.

Sopa de chaya

Ingredientes:

500 ml de caldo de pollo

1 taza de hojas de chaya troceadas

1 taza de hojas de espinaca troceadas

1 taza de chayote en cubitos

1 taza de zanahoria en cubitos

1 cucharada de pepitas molidas

3 ramitas de cilantro

1/2 taza de cebolla cruda

1/2 naranja agria

Sal

Pimienta

Coloca el caldo de pollo a calentar y agrega las hojas de chaya y de espinacas, previamente lavadas y troceadas, junto con el chayote, la zanahoria, la cucharada de pepitas molidas y el cilantro, deja en fuego medio alto por alrededor de 15 a 20 minutos, en cuanto comience a hervir agrega sal y pimienta para sazonar, deja por otros 5 a 10 minutos en fuego bajo, retira del fuego y sirve caliente.

Agrega cebolla cruda picada finamente, el jugo de la naranja agria, o bien, si no consigues naranja agria, utiliza el jugo de la naranja y mézclalo con el jugo de limón para obtener el sabor. Esta sopa también puede acompañarse con un huevo cocido y pepitas o semillas de calabaza enteras.