Desayuno mexicano

Chilaquiles divorciados, la mejor receta para comenzar el domingo

Los chilaquiles son el platillo ideal para un desayuno en familia sin complicaciones
sábado, 31 de octubre de 2020 · 23:00

El desayuno es una de las comidas más importante del día, así que este debe ser un plato muy abundante y llenador para que puedas comenzar con tus actividades del día lleno de energía. Los chilaquiles son por excelencia el desayuno típico mexicano, en especial después de una noche de celebración o exceso de copas que nos despiertan con ganas de una receta picosita que nos ayude a aliviar los síntomas de una desvelada para seguir con la vida.

El término “divorciados” es muy utilizado para hacer referencia a las preparación que llevan dos tipos de salsas y aunque opuestas se complementan de forma perfecta para darle vida a una receta espectacular. En este caso, los chilaquiles son un muy buen ejemplo de este término, ya que pueden ir acompañados de una sola salsa o dos, así como su porción de proteína como huevo, pollo, arrachera o cecina. Sin más rodeos, aquí te dejamos la receta de los chilaquiles divorciados para que la prepares en casa. 

Chilaquiles divorciados

Ingredientes: 

Para los chilaquiles

½ kilo de tortillas cortadas en triángulos

2 tazas de crema

100 gramos de queso fresco

½ cebolla cortada en tiras

Aceite, el necesario

Para la salsa roja

½ kilo de jitomate

2 chiles pasilla

¼ de cebolla pequeña

1 diente de ajo pelado

Sal al gusto

Para la salsa verde

½ kilo de tomate

1 diente de ajo pelado

¼ de cebolla pequeña

7 chiles verdes

Sal al gusto

Preparación: 

Para los chilaquiles

Una vez que cortaste todas las tortillas en triángulos, vas a colocar en una sartén un poco de aceite, deja calentar a fuego medio por un minuto. Vierte poco a poco las tortillas y deja que se doren por unos 5 minutos o hasta que se conviertan en pequeñas tostadas; recuerda revolver de forma constante para que no se quemen o haya tortillas sin dorar. Retira del fuego y deja escurrir en un papel de cocina absorbente. Reserva. 

Para la salsa roja 

En el comal, coloca los chiles pasilla, junto con los jitomates, la cebolla y el ajo, deja asar a fuego medio hasta que la piel de los jitomates comiencen a desprenderse. Vierte todos los ingredientes en la licuadora junto con una pizca de sal y un chorrito de agua. 

En una cacerola, agrega un chorrito de aceite y vierte la salsa. Deja cocinar a fuego medio por unos 5 minutos hasta que espese un poco. Retira del fuego y reserva. 

Para la salsa verde

En una cacerola, vierte todos los ingredientes y cubre con suficiente agua. Deja cocinar por unos 5 minutos o hasta que llegue al hervor. Vierte todos los ingredientes en la licuadora junto con un chorrito de agua y licúa por unos 2 minutos hasta obtener una salsa. 

En otra olla, coloca un poquito de aceite y vierte la salsa. Deja cocinar por 5 minutos hasta que sazone. Retira del fuego y reserva. 

Sirve

En platos hondos, coloca un poco de las tortillas que freíste previamente y enseguida baña la mitad con salsa roja y la otra mitad con salsa verde. Decora con un poco de crema, queso fresco y cebolla, incluso puedes añadir un huevo estrellado o un poco de pollo deshebrado al gusto. Disfruta de inmediato.