Comenzar tu día con algo saludable y que además también sea dulce no solo es posible y fácil, también puedes llegar a tener un impacto positivo en la salud de varios órganos importantes, como el cerebro. Este pudín de chía con frutos rojos y nueces te lo demuestra, y además es ideal para aquellas personas que buscan un desayuno rápido, delicioso y muy nutritivo, ayudándote a mejorar la memoria y la concentración desde las primeras horas del día.
El omega 3 resulta un ácido graso muy esencial, pues desempeña un papel clave en la función cerebral: ayuda a construir y reparar membranas celulares en el cerebro, promueve la circulación entre neuronas y se asocia a una mejor memoria, así como a un menor riesgo de depresión y un menor deterioro cognitivo con el paso del tiempo. Por eso, incluirlo en nuestra dieta diaria puede marcar una gran diferencia en el rendimiento mental y en la salud del cerebro a largo plazo.
En esta receta, las semillas de chía son las que aportan omega 3, pues son ricas en una variedad de este nutriente llamada ácido alfa-linolénico (ALA), pero además otros ingredientes también pueden aportarlo, como las nueces. Y por si fuera poco, los frutos rojos aportarán antioxidantes importantes que ayudan a proteger el cerebro del envejecimiento. No podemos olvidarnos de la leche: le puede aportar calcio y vitamina D, haciendo de este desayuno un plato muy completo.

Pudín de chía con frutos rojos y nueces
- 3 cucharadas de semillas de chía
- 1 taza de leche o leche vegetal
- 1 cucharadita de miel
- 1/3 taza de frutos rojos
- 1 cucharada de nueces picadas
Pasos:
- En un recipiente, mezcla las semillas de chía, la miel y la leche.
- Mezcla bien, tapa y refrigera por 4 horas o toda la noche.
- Machaca los frutos rojos para obtener un puré uniforme.
- Sirve por encima del pudín de chía hidratado.
- Agrega las nueces picadas por encima y disfruta.
Si lo que buscas es complementar aún más tu ingesta de omega 3, también puedes incluir en tu dieta alimentos como el aguacate, la linaza o los pescados azules (atún, salmón o sardinas), si consumes productos de origen animal. Todas estas opciones son muy fáciles de integrar a la alimentación y pueden ayudarte a mantener niveles óptimos de ácidos grasos esenciales en tu cuerpo de forma fácil.
Pero la alimentación no es lo único que deberás cuidar para favorecer tu salud cerebral. También debes adoptar hábitos saludables, como mantener una rutina de sueño constante, ejercitarte regularmente, cuidar tus niveles de estrés e incluso entrenar tu memoria y practicar técnicas de atención plena, como la meditación, juegos mentales, lectura y aprendizaje continuo, ya que al igual que tu cuerpo, tu mente necesita cuidado diario.