Si quieres disfrutar de un postre cremoso y delicioso en casa, pero quieres evitarte el uso del horno y procesos complicados para cocinar, entonces este flan napolitano te encantará. Aunque tradicionalmente se hornea a baño maría, una excelente forma de elaborarlo es aprovechando la olla de presión, lo que reduce el tiempo de cocción sin sacrificar la textura perfecta y cremosa de este postre clásico.
Cocinar en olla exprés no solo te permite obtener resultados en menos tiempo, ya que el calor se distribuye de manera uniforme y eficiente, también te ayuda a ahorrar combustible y te permite obtener resultados increíbles sin tanto esfuerzo. Si nunca has intentado hacer un flan de esta forma, te sorprenderá lo fácil que puede ser, solo necesitas seguir los pasos que te dejamos a continuación.
Para realizar este postre cremoso en olla de presión utilizaremos azúcar para el caramelo, leche condensada, leche evaporada, huevos y un toque de esencia de vainilla. Puedes integrar otros elementos como el queso crema, pero este es totalmente opcional. Lo que aportará este elemento será una increíble cremosidad y un sabor a leche aún más intenso, así que, aunque no sea necesario para elaborar el postre, te recomendamos que sí lo integres entre los ingredientes.
Flan napolitano
- 1 taza de azúcar
- 1 lata de leche condensada
- 1 lata de leche evaporada
- 4 huevos
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 90 gramos de queso crema
Pasos
- En un sartén o cacerola, derrite el azúcar hasta que tome un color dorado.
- Distribuye el caramelo de manera uniforme en el fondo de la cacerola donde harás el flan.
- En la licuadora, procesa la leche condensada con la leche evaporada, los huevos, la vainilla y el queso.
- Vierte esta mezcla sobre el caramelo y tapa el molde con papel aluminio.
- Coloca dos tazas de agua en la olla de presión y agrega una rejilla en el fondo.
- Coloca el molde con la mezcla para flan sobre la rejilla y tapa tu olla.
- Lleva la olla a cocinar a fuego medio y cuenta 30 minutos una vez que empiece a soltar vapor.
- Después del tiempo de cocción, apaga el fuego y deja enfriar la olla por completo.
- Retira el flan del interior de la olla y lleva a refrigerar por 2 horas.
- Sirve y disfruta.
La razón detrás de la refrigeración del flan se debe a que este postre puede tomar una textura más cremosa después de la cocción si lo dejamos enfriar correctamente. Lo ideal es reposar el flan por algunas horas en frío, pero si es posible, déjalo toda la noche. Verás que toma una textura increíble, además, el caramelo penetrará mejor en el flan y tendrá un sabor aún más rico.
Otro detalle que debes considerar es que debes derretir el azúcar para hacer el caramelo a fuego muy bajo para evitar que esta mezcla se queme, lo cual puede suceder bastante fácil. Si dejas que el caramelo llegue a tomar un color demasiado oscuro, el sabor será muy amargo y se notará en el resultado final, así que cuida la temperatura del caramelo.
